Dicen que en la amistad o en la pareja, la falta de confianza puede llevar a la ruptura total pero, ¿qué ocurre cuando se pierde la confianza en la política?
Ni siquiera 1 de cada 10 argentinos confía en los políticos. ¿Los motivos de esta desconfianza? " La falta de franqueza y la preferencia por la opinión en lugar de la acción". Podrían ser también la crisis económica, el acuerdo con el FMI, la inflación, la inseguridad, la corrupción e incluso el nulo cuidado del medio ambiente... pero lo cierto es que tampoco hay confianza en los jueces ni el sistema judicial. Menos aún en los sindicalistas, y apenas un poco más en los movimientos sociales y las Fuerzas de la Seguridad.
La imagen negativa de los políticos vuela. El presidente de la Nación, Alberto Fernández, cosecha el 62,4% de imagen positiva, la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner casi el 70% (69,2), entre ambas se ubica la del gobernador de la provincia más populosa del país, Axel Kicillof, con el 65,9%, y el opositor Mauricio Macri roza el 60% (59.4%)...
Los datos surgen del Monitor Nacional de Taquion, realizada entre el 15 y el 21 de febrero, sobre la apertura de sesiones ordinarias, acuerdo con el FMI y la realidad de los argentinos, que además de la desconfianza destaca que solo 2 de cada 10 argentinos piensan que el acuerdo con el FMI va a beneficiar a la Argentina; que 8 de cada 10 están poco o nada de acuerdo con fomentar un desarrollo productivo sin perspectiva ambiental, y que apenas 1 de cada 10 centennials se quedaría en el país.
Los datos chocan con la confianza de los argentinos hacia sus pares, dato que va en aumento. Más precisamente, subió 33 puntos. Eso marca, según el informe que "prevalece la conexión y solidaridad" frente a un grieta que se queda dentro de la política, y que expulsa a las nuevas generaciones más allá de las fronteras.
El 85,1% de los jóvenes, según datos de Taquion, migrarían a otros Estados motivados por "la incertidumbre, el hartazgo y el desencanto con la política tradicional que se vive en la Argentina".
En efecto, serían estas generaciones las que más sostienen que el acuerdo con el FMI comprometerá el futuro del país. Son ellos, justamente, quienes deberán pagar esa renegociación...
Además, los sentimientos sobre el futuro que prevalecen hoy son negativos: el 54,2% son preocupación, desconfianza y miedo, y apenas el 16,3% siente esperanza, confianza y seguridad.
"La concientización ambiental es un punto de preocupación que ha aumentado su relevancia considerablemente en los últimos años. A diferencia de otros tópicos, la perspectiva ambiental es compartida de manera intergeneracional e interpartidaria, con excepción de los liberales, quienes no consideran, en parte, que la cuestión ambiental sea prioritaria", sostiene el informe.
Medios de comunicación
¿Cuánto tienen que ver los medios de comunicación en esta relación de fuerte desconfianza?
Se sabe que el triángulo entre la política, los medios de comunicación y la sociedad es complejo de disociar como también que la desconfianza en la política está atravesada por los medios. Y la confianza en los medios de comunicación también viene en caída...
El 61,4% no confía en los medios de comunicación frente a un 30% que sí lo hace, pero que se acentúa a medida que se desciende en las generaciones. Entre los más jóvenes, apenas el 24,6% confía en los medios. Son los mismos que eligen las redes sociales para informarse (mayormente Instagram) en detrimento de medios más tradicionales como la tele, el más recurrido por los mayores de 56 años, llamados los 'Baby boomers'.
Por supuesto, que más allá de lo exhaustiva que haya sido la encuesta no es determinante, pero debería ser, al menos, preocupante... Una alarma difícil de apagar.
urgente24