Los manifestantes gritaron consignas de denuncia contra el líder supremo de Irán en el agitado sureste del país el viernes, mientras que un grupo de derechos humanos dijo que al menos 100 manifestantes detenidos se enfrentaban a posibles condenas a muerte.
Desde mediados de septiembre se han producido manifestaciones en todo el país contra la cúpula clerical, tras la muerte en prisión de una mujer kurda iraní de 22 años, detenida por llevar un "atuendo inapropiado" según el estricto código de vestimenta islámico para las mujeres.
"Muerte al dictador, muerte a Jamenei", coreaban los manifestantes en referencia al líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, en un vídeo difundido en las redes sociales desde Zahedán, capital de la provincia de Sistán-Baluchistán. Imágenes que Reuters no pudo verificar.
En esta empobrecida provincia vive la minoría baluch de Irán, compuesta por unos dos millones de personas, que, según grupos de derechos humanos, ha sufrido discriminación y represión durante décadas.
Algunos de los peores disturbios de los últimos meses se han producido en zonas donde residen grupos étnicos y religiosos minoritarios que llevan mucho tiempo enfrentados con el Estado, como en Sistán-Baluchistán y en las regiones kurdas.
Las protestas, en las que manifestantes de todas las clases sociales han pedido el fin de la teocracia gobernante en Irán, han supuesto uno de los mayores desafíos para la República Islámica, gobernada por musulmanes chiíes, desde la revolución de 1979.
EL BANCO CENTRAL APOYARÁ LA MONEDA
Desde que comenzaron las protestas hace más de tres meses, la moneda iraní ha perdido una cuarta parte de su valor y ha caído a mínimos históricos en el mercado no oficial de libre flotación, ya que los desesperados iraníes han comprado dólares estadounidenses y oro para proteger sus ahorros de una inflación del 50%.
El viernes, el nuevo gobernador del banco central del país, Mohammad Reza Farzin, declaró a la televisión estatal que el banco intervendría en el mercado de divisas para apoyar al rial.
"La tasa de cambio (actual) está distorsionada (...) y, por supuesto, intervendremos en el mercado libre", declaró Farzin, que fue nombrado el jueves.
Por otra parte, un grupo de derechos humanos afirmó que al menos 100 manifestantes detenidos en Irán se enfrentan a posibles condenas a muerte.
reuters