Contradictorio, Axel Kicillof. Este martes 03/12 el Gobierno nacional aumentó el cepo al dólar turista elevando el recargo a las compras al exterior con tarjeta al 35% y trasladándolo a la compra de la divisa. La medida generó la inmediata suba del dólar ‘libre’, que se disparó quebrando la tendencia a la baja que venía experimentando con el acortamiento de la brecha cambiaria. Ahora Axel cambia las reglas de juego de nuevo: la AFIP permitirá la compra del dólar turista sin restricciones ni limites a quienes tengan ingresos declarados y además habrá cambios en la instrumentación de las DJAI para agilizar los trámites de importaciones. En tanto, Juan Carlos Fábrega estaría trabajando en el desarrollo de 2 instrumentos en pesos, pero con un rendimiento atado a la evolución del tipo de cambio, para contener las expectativas de una mayor devaluación y, al mismo tiempo, satisfacer la demanda de divisas de los inversores.
(Urgente24).- En tan solo 2 jornadas cambiarias Axel Kicillof se dio cuenta de que el cepo ampliado al dólar turista empeoró las cosas con el dólar ‘libre’ que volvió a dispararse mientras se agudizaba la sangría de reservas del Banco Central. Ahora Axel pega el ‘volantazo’ y si bien no puede volver atrás con el aumento del recargo a las compras con tarjeta de crédito y a la adquisición de dólares para el turismo, flexibiliza el acceso a la divisa través de la AFIP y por otro lado hace lo propio en materia de importaciones.
Claro que levantar las barreras al dólar turista implicará que el Central venderá más dólares –hasta ahora la AFIP permitía compras a cuentagotas- pero esperan que dará cierta previsibilidad, reducirán las expectativas negativas de empresarios y consumidores y, a la larga, impulsarán el crecimiento, estima el diario El Cronista.
La intención oficial es que todo aquel contribuyente con ingresos en blanco que pida divisas en el sistema online de la AFIP acceda a ellas. El monto permitido para comprar, aclararon, será el mismo: entre 80 y 100 dólares por día de estadía en el exterior, en función del destino.
El criterio por el cual el organismo que dirige Ricardo Echegaray autorizaba o no el acceso a las divisas era aleatorio. Así, ocurría que una persona podía obtener o no la autorización pese a tener todo en regla.
"El problema es que al no conocerse el criterio por el cual la AFIP autorizaba o no la venta de moneda extranjera esto provocaba que muchas personas directamente optaban por cambiar sus pesos en el mercado marginal", explicó una fuente del Gobierno al diario Ámbito Financiero.
Tanto Jorge Capitanich como Kicillof creen que, en algún momento, las reservas comenzarán a subir con el financiamiento externo y la liquidación de exportaciones. Además, auguran que si el blue baja y el peso se sigue devaluando el turismo externo volverá a vender sus dólares en las casas de cambio oficiales.
En cuanto a las importaciones, el flamante secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, instruirá la semana próxima un nuevo procedimiento para autorizar las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI), la barrera de entrada que controlaba a mano Guillermo Moreno.
La idea es posibilitar el ingreso de bienes destinados a la producción. La condición para importar insumos será no trasladar el incremento de los precios internacionales por la mayor devaluación del peso a los precios.
Bonos
De acuerdo a fuentes de mercado que consultó el diario La Nación, el Banco Central estaría trabajando en el desarrollo de 2 instrumentos en pesos, pero con un rendimiento atado a la evolución del tipo de cambio, para contener las expectativas de una mayor devaluación y, al mismo tiempo, satisfacer la demanda de divisas de los inversores.
De inmediato, en la red social Twitter el abogado conocedor del mercado financiero y bursátil Carlos Maslatón escribió:
@CarlosMaslaton
BCRA planea emitir bonos ajustables por dólar. Están locos? Esto genera desconfianza, no se pagarán nunca, defaultearán, incentivarán corrida.
Parte de la estrategia del BCRA para contrarrestar la caída de reservas pasaría luego por desarrollar instrumentos atados al dólar, que seduzcan a los exportadores y, al mismo tiempo, aplaquen la especulación de un fuerte salto en el tipo de cambio.
Primero, el BCRA ya habría acordado con las cerealeras entregarles una letra en pesos atada al dólar (dollar-linked, tal como se la llama en la jerga financiera), a cambio de que éstas consigan en el exterior préstamos en dólares en adelanto de las divisas que recibirán a partir de marzo o abril como parte de la cosecha gruesa. Aunque desde el Gobierno se habló que podrían llegar a ingresar por las cerealeras US$ 2.000 millones, por ahora, sólo se habría acordado una 1ra. cuota de US$ 350 millones.
La idea del BCRA, confiaron las fuentes del mercado, sería que la letra se pueda endosar, cosa de que pueda circular de las cerealeras a los productores de granos que, según estimaciones que se manejan en la autoridad monetaria, tendrían unos 10 millones de toneladas de soja almacenados, por unos US$ 6.500 millones.