Este jueves, en sesión especial, el Senado va a retirar los pliegos que había enviado Mauricio Macri para la designación de jueces. “El criterio que eligió Macri fue manifiestamente contrario a lo que marca el proceso”, consideraron desde la presidencia del Senado a cargo de Cristina Kirchner. A partir de esa decisión, Alberto Fernández tendrá vía libre para elegir cerca de 200 magistrados que Macri había seleccionado pero que nunca obtuvieron acuerdo del Senado de mayoría peronista.
Esta decisión del Senado se tomará días después de que un grupo de senadoras kirchneristas presentara un proyecto de ley para limitar el uso de las prisiones preventivas. Plantea una serie de supuestos para la anulación de las detenciones, como la difusión de investigaciones periodísticas contra el involucrado, la intromisión de funcionarios de Gobierno en la causa o la “inobservancia de las normas procesales con fines de persecución política”.
El proyecto es encabezado por la puntana camporista Eugenia Catalfamo, y acompañado por la correntina Ana Almirón, la chubutense Nancy González, la chaqueña María Inés Pilatti Vergara y la santacruceña Ana María Ianni. Son las principales espadas de Cristina en el Senado junto con la mendocina Anabel Fernández Sagasti. Es difícil que este proyecto haya salido sin consentimiento de la vicepresidenta.
Desde el Ejecutivo salieron a aclarar que eran posiciones individuales de las senadores y a criticar el proyecto. Pero el tema ya está instalado como debate adentro del Gobierno. A veces estas cosas funcionan como una prueba piloto.
No es casual que justo el mismo día Alberto Fernández retwitteara un video hecho por la secretaría de Derechos Humanos en que se denuncian persecusiones políticas del gobierno de Macri con frases como:
- “Argentina sufrió graves violaciones a los derechos humanos”.
- “El relator especial sobre independencia de los magistrados y abogados de la ONU emitió un informe alertando sobre “la existencia de un plan sistemático y estructural de amedrentamiento del Poder Judicial en la Argentina”.
Muestra imágenes de Lula, Rafael Correa. O de Garavano al denunciar la ley del arrepentido, de Gustavo Arribas abrazado con Macri (al hablar de espionaje ilegal), entre otras.
El video además toma un fragmento del discurso de asunción de Alberto Fernández. “Nunca más a una Justicia que decide y persigue según los vientos políticos del poder de turno. Lo digo con la firmeza de una decisión profunda. Cuando digo nunca más, es nunca más". Casualmente, el mismo tramo del discurso que cita en sus fundamentos el proyecto de ley de las senadoras sobre las prisiones preventivas.
Las peleas entre el albertismo y el kirchnerismo en torno a los presos por “corrupción” o “arbitrarios” o “presos políticos” (según la definición que se elija) escalaron fuerte en la última semana. Sorprendió el tono del video que hizo el camporista Pietragalla Corti a cargo de los derechos humanos. Más sorprendió que Alberto lo difundiera. Dato color: Pietragalla estuvo en los últimos días visitando a Boudou y D’elía en la cárcel según pudo confirmar A24.com.
En los últimos años el lawfare se instaló en Argentina.
Entonces cuestioné la complacencia judicial y mediática con el poder político que posibilitó la persecución y detención arbitraria de opositores.
Nunca más a una justicia que decide y persigue según los vientos políticos.
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Los enfrentamientos con la Justicia no terminan ahí. Se presentó el viernes en Diputados el proyecto que limita las jubilaciones “de privilegio” de los jueces. Ellos aclaran que no son de privilegio sino que aportan toda su vida de acuerdo a una ley vigente que contempla, entre otras cosas, que los magistrados no pueden tener otros trabajos mientras ejercen sus funciones como para generarse un colchoncito para la vejez. La Asociación de Magistrados aclaró que están dispuestos a discutir una reforma pero reclamaron participación en el debate.
En Diputados, el oficialismo necesita ayuda de otros bloques para aprobar la norma y el lobby judicial es suficientemente extenso para que, por lo menos, se produzcan modificaciones.
Paralelamente avanza el tratamiento del pliego de Daniel Rafecas, el hasta hoy juez que es candidato a ocupar el cargo de Procurador General de la Nación. Se necesitan los 2/3 de los votos para aprobarlo. El Gobierno, con algunos aliados, está muy cerca de obtener los 48 votos necesarios; si faltara alguno podría apelar a algún radical que se levante o se vaya de viaje al momento de votar, ya que los 2/3 son de los presentes.
¿Cuál es el proyecto de Rafecas para la Procuración? Mucho no se sabe aún. Desde Juntos por el Cambio analizan si apoyar o no su designación. Lo que está definido es que van a votar todos juntos: no habrá fisuras en el interbloque. Aunque, claro, hay algunos senadores o senadoras que están más lejos que cerca de la unidad.
Habrá que ver qué grado de disciplina logran los referentes del principal espacio opositor. La votación de ese pliego recién se hará después del inicio de las sesiones ordinarias, en marzo o abril.