La petrolera portuguesa Galp vio reducirse su beneficio neto en 2013 en un 14 % respecto al ejercicio anterior, hasta los 310 millones de euros, un resultado ligeramente mejor que el esperado por los analistas.

El aumento de la producción petrolífera (15 %) y el crecimiento de las exportaciones más allá del mercado ibérico de productos refinados (21 %) fueron dos factores que contribuyeron positivamente a las cuentas de la compañía.
Los ingresos totales del grupo ascendieron a 19.620 millones de euros, un 6 % más que en 2012, y su resultado bruto de explotación (Ebitda) se incrementó en un 10,5 %, hasta los 1.100 millones de euros.
El 83 % de su negocio procedió del sector de refinado y distribución, muy por delante del de explotación y producción (0,03 %) y del de gas (16,7 %).
En su facturación, clave fue la venta de gas natural, que alcanzó un máximo histórico de 7.090 millones de metros cúbicos.
Sin embargo, también aumentaron el año pasado los costes operativos, concretamente un 6 %, debido al encarecimiento de las actividades de abastecimiento y transporte, hasta sumar 18.515 millones de euros.
Galp destinó al capítulo de inversión 963 millones de euros en 2013, un 11,8 % más, y de ellos tres cuartas partes se dirigieron al sector de explotación y producción, donde se incluyen actividades de prospección como las que se llevan a cabo en el campo Lula/Iracema, en Brasil.
El margen de refinanciación de la firma lusa, conocido como la diferencia entre el valor del crudo y los ingresos generados por su venta en forma de productos petrolíferos (gasóleo, gasolina, etc.), se mantuvo sin cambios respecto a 2012 en los 2,2 dólares por barril (1,6 euros).
La deuda líquida de Galp aumentó en este periodo un 28 %, hasta los 2.147 millones de euros. EFE