Letonia, uno de los países que más afectados por la crisis económica, se convirtió en el decimoctavo miembro de la Unión Europea que asume el euro como moneda.
Según la agencia de noticias EFE, a primera hora el primer ministro letón, Valdis Dombrovskis, retiró un billete de diez euros de un cajero automático instalado en un escenario en la plaza Republikas, en el centro de Riga.
En la ceremonia para celebrar la puesta en circulación de la moneda común en Letonia participó el primer ministro de Estonia, Andrus Ansip, cuyo país adoptó el euro hace tres años.
"Es un gran acontecimiento, no sólo para Letonia, sino para la propia zona del euro, que se mantiene estable, atractiva y abierta a nuevos miembros", recalcó el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, en su mensaje de felicitación a los letones.
Según Barroso, la incorporación de Letonia a la eurozona es resultado de los "impresionantes esfuerzos y la firme determinación de las autoridades y el pueblo de Letonia".
El país se había comprometido a adoptar la moneda común europea en el momento de entrar en la Unión Europea, en 2004.
El Gobierno lanzó una potente campaña en favor del euro y de las bondades que suponía su adopción para el país, con una población de poco más de dos millones de habitantes, y consiguió en cierta medida revertir los ánimos de los letones.
Hace un año, más de 80 por ciento de los letones se mostraba preocupada por el abandono de la moneda nacional, el lat, y temía subas de precios y mayores ajustes.
Para comienzos de diciembre pasado, 53 por ciento respaldaba la unión monetaria, de acuerdo con la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.
Los primeros síntomas de recuperación en la eurozona ayudaron a moderar el escepticismo de los letones.
El ministro de Finanzas letón, Andris Vilks, subrayó que la transición al euro debería transcurrir sin mayores inconvenientes, como ocurrió en la vecina Estonia.
Los lats podrán ser cambiados a un tasa 0,702804 lats por euro sin límite de tiempo ni de cantidad únicamente por el Banco Central de Letonia, mientras que en otras instituciones financieras este plazo será sólo de seis meses.
Las próximas dos semanas el lat y el euro circularán de forma conjunta, pero los comercios darán cambio solo en la moneda común, que será la única que se podrá retirar de los cajeros automáticos.
Según la agencia de noticias EFE, a primera hora el primer ministro letón, Valdis Dombrovskis, retiró un billete de diez euros de un cajero automático instalado en un escenario en la plaza Republikas, en el centro de Riga.
En la ceremonia para celebrar la puesta en circulación de la moneda común en Letonia participó el primer ministro de Estonia, Andrus Ansip, cuyo país adoptó el euro hace tres años.
"Es un gran acontecimiento, no sólo para Letonia, sino para la propia zona del euro, que se mantiene estable, atractiva y abierta a nuevos miembros", recalcó el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, en su mensaje de felicitación a los letones.
Según Barroso, la incorporación de Letonia a la eurozona es resultado de los "impresionantes esfuerzos y la firme determinación de las autoridades y el pueblo de Letonia".
El país se había comprometido a adoptar la moneda común europea en el momento de entrar en la Unión Europea, en 2004.
El Gobierno lanzó una potente campaña en favor del euro y de las bondades que suponía su adopción para el país, con una población de poco más de dos millones de habitantes, y consiguió en cierta medida revertir los ánimos de los letones.
Hace un año, más de 80 por ciento de los letones se mostraba preocupada por el abandono de la moneda nacional, el lat, y temía subas de precios y mayores ajustes.
Para comienzos de diciembre pasado, 53 por ciento respaldaba la unión monetaria, de acuerdo con la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.
Los primeros síntomas de recuperación en la eurozona ayudaron a moderar el escepticismo de los letones.
El ministro de Finanzas letón, Andris Vilks, subrayó que la transición al euro debería transcurrir sin mayores inconvenientes, como ocurrió en la vecina Estonia.
Los lats podrán ser cambiados a un tasa 0,702804 lats por euro sin límite de tiempo ni de cantidad únicamente por el Banco Central de Letonia, mientras que en otras instituciones financieras este plazo será sólo de seis meses.
Las próximas dos semanas el lat y el euro circularán de forma conjunta, pero los comercios darán cambio solo en la moneda común, que será la única que se podrá retirar de los cajeros automáticos.