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La evolución y la innovación son fuerzas intrínsecas en nuestra sociedad, y el sistema bancario no es ajeno a ellas. En los últimos años, la tecnología blockchain ha cobrado relevancia en el ámbito financiero, y las Monedas Digitales de Bancos Centrales (CBDC) se han erigido como herramientas prometedoras para impulsar la transformación del sector.
Las CBDC son monedas digitales reguladas por contratos inteligentes y emitidas por bancos centrales, respaldadas por sus respectivas reservas nacionales y reguladas por las autoridades financieras. El gran cambio es la delegación por parte de los bancos centrales de la gestión de la política monetaria en los contratos inteligentes por reglas consensuadas democráticamente.
Gracias a la tecnología blockchain, estas monedas digitales garantizan transparencia, eficiencia y seguridad en las transacciones, convirtiéndose en una alternativa atractiva tanto para consumidores como para instituciones financieras.
En África, varios países han experimentado con CBDCs, buscando capitalizar sus ventajas y aprender de los desafíos asociados. Nigeria, por ejemplo, lanzó su moneda digital, el eNaira, con el fin de facilitar las transacciones financieras y reducir costos para los usuarios. A pesar de enfrentar obstáculos como la falta de infraestructura digital y la desconfianza ciudadana, se espera que la adopción de la moneda digital se generalice con el tiempo.
Sin embargo, es crucial recordar que la tecnología por sí sola no puede solucionar todos los problemas. Recientemente, Francia propuso una moneda digital vinculada al euro, pero algunas de las propuestas carecen de la solidez técnica y conceptual necesaria para aprovechar plenamente la tecnología blockchain.
En particular, el "contrato inteligente" que regula esta moneda digital contiene varias puertas traseras que contravienen los principios de inmutabilidad y autonomía de los activos en blockchain. Entre las preocupaciones se encuentran:
La autoridad central o cualquier entidad con la dirección registrada puede mover todos los tokens de cualquier billetera, socavando la descentralización y el control del usuario sobre sus propios activos.
Se incluye una función que permite "quemar" todo el dinero de una billetera, lo que plantea preocupaciones sobre la confidencialidad y la privacidad financiera de los usuarios.
Cada transferencia de token ERC20 debe ser aprobada por una entidad centralizada paralela, lo cual va en contra de la naturaleza descentralizada y transparente de la tecnología blockchain.
Estas funciones propuestas contradicen los principios fundamentales de la tecnología blockchain y parecen encubrir acciones orientadas a preservar una política monetaria autárquica, en lugar de una autónoma y regida por leyes y normativas acordadas y aplicables a largo plazo.
Para garantizar un enfoque adecuado en las propuestas de CBDC, es fundamental establecer marcos regulatorios apropiados y promover la educación financiera. Es esencial que los ciudadanos comprendan y utilicen estas herramientas de manera efectiva y responsable. La transparencia que ofrece la tecnología blockchain permite a todos mantenerse vigilantes y observar las acciones propuestas.
Un ejemplo hipotético de cómo una CBDC podría mejorar la transparencia en una economía como la Argentina, sería la implementación de un "Peso Digital". Al emitir una moneda digital respaldada por el banco central, sería posible tener un indicador público y transparente de la emisión monetaria, lo que podría ayudar a controlar la inflación y aumentar la confianza en la economía. En este escenario, cualquier situación que requiera modificar las reglas del contrato digital, necesitaría el respaldo de al menos dos tercios del congreso.
En el contexto actual, donde la dolarización es un tema de debate, es crucial recordar que no se puede construir el futuro con herramientas del pasado. Conseguir la libertad económica de los habitantes de un país, mediante su propia moneda no es una utopía, sino un objetivo realista y deseable. Tener nuestra propia moneda también es un acto de soberanía, y esto es innegable. ¿O acaso que diría el general San Martin quien presionó a la asamblea del año 13 para acuñar nuestra primera moneda patria como muestra de soberanía?
Si se implementan correctamente, las CBDCs no tienen por qué ir en contra de la descentralización; por el contrario, podrían potenciarla. La adopción masiva de "billeteras digitales" permitiría que más personas accedan a aplicaciones basadas en blockchain, y estas "billeteras" podrían convertirse en "pasarelas" hacia la blockchain, consolidando así la nueva Web3.
En última instancia, la adopción de CBDCs y la tecnología blockchain tiene el potencial de cambiar nuestra relación con el dinero, así como el valor y sentido de propiedad que atribuimos a las cosas. A medida que avanzamos hacia un futuro más digitalizado y conectado, es esencial que nos comprometamos a adoptar y adaptarnos a estas innovaciones, garantizando al mismo tiempo que se promueva la inclusión, la equidad y la sostenibilidad del sistema económico y financiero global
Rodolfo Vigliano, cofundador y CEO de PALA Blockchain
Rodolfo Vigliano es Co-fundador y CEO de PALA Blockchain. Como miembro y experto certificado en tecnologías Blockchain por el Blockchain Council (BC EE.UU, 2022) es una de las voces autorizadas en el emergente mercado de las tecnologías de registro distribuido (Distributed Ledger Technologies, DLT). Rodolfo Vigliano es Ingeniero en Electrónica recibido en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN ARG, 1997), Magister en Ingeniera Gerencial (MBA UTN, 1999) y es egresado del programa de formación ejecutiva de la Harvard Business School (GMP19 EE.UU, 2015).
