En plena crisis bancaria desatada durante los útlimos días en EEUU y Europa, la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) decidió este miércoles incrementar la tasa de interés de referencia 25 puntos básicos, a un rango de entre 4,75-5,00%, en su objetivo por controlar la inflación.
Después de un año de aumentos de tasas permanentes como consecuencia de una inflación rebelde, el organismo se enfrentaba a un escenario muy vidrioso signado por el derrumbe de varios bancos regionales que trasladó los temores de una crisis financiera a todo el sistema.
ambito