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Con déficits anuales que superan los 14.000 millones de pesos, la empresa que administra Gonzalo Atanasof, que hoy milita dentro de las filas del ministro Gabriel Katopodis, superpone sus tareas con Vialidad Nacional y reclaman una urgente solución.
Creada durante la presidencia Mauricio Macri tras una iniciativa conjunta entre el ex ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y el ex titular de Vialidad Nacional, Javier Iguacel, Corredores Viales SA se volvió el centro de la polémica desde sus comienzos.
Corredores Viales es una empresa de capital social íntegramente estatal, cuyos accionistas son el ministerio de Obras Públicas, con el 51 por ciento de las acciones, y Vialidad Nacional, con el 49 por ciento restante.
Desde sus comienzos, la empresa fue duramente criticada y considerada tan innecesaria como deficitaria. En efecto, sus objetivos parecieran chocarse con los de Vialidad Nacional y los números rojos, provocados por una secuencia de malas gestiones, despiertan alarmas.
Horas atrás, Corredores Viales SA anunció la ampliación de su flota de móviles de seguridad vial. “Vamos a complementar el Operativo Sol, reforzando nuestra presencia en las rutas y autopistas nacionales”, anunció su presidente, Gonzalo Atanasof.
Atanasof, que supo militar con Francisco De Narváez en el espacio Unión Celeste y Blanco para enfrentar al kirchnerismo, volvió a arrastrar a la sociedad anónima estatal a un preocupante rojo financiero. De acuerdo a fuentes oficiales, este año Corredores Viales SA acumuló un déficit de 14.000 millones de pesos, que tuvo que salir a cubrir el gobierno.
“Los errores de Atanasof los pagamos todos los usuarios viales con nuestros peajes”, aseguraron a REALPOLITIK desde el Comité Nacional de Defensa del Usuario Vial. Del mismo modo, desde el dinero de todos pareciera haberse financiado el último gusto del titular de Corredores Viales SA.
Los 26 furgones nuevos Ford Transit y Citroen Jumper que compró Atanasof le costaron a una empresa ya deficitaria unos 274.931.218 pesos, a un ritmo de 8 millones por cada una, más una cifra que oscila entre 2 y 3 millones más por vehículo en concepto de equipamiento.
“Esas camionetas las debiera tener Vialidad Nacional, y no Corredores Viales, que es una empresa indebida, burocrática e innecesaria y que funciona en forma paralela a Vialidad Nacional. Fue duramente criticada y denunciada por el Frente para la Victoria, y ahora que es gobierno, el Frente de Todos mira para otro lado”, explicaron desde el Comité Nacional de Defensa del usuario Vial.
Mientras tanto, Atanasof continúa levantando con orgullo la bandera de la falta de eficiencia en la administración de Corredores Viales SA. A pesar de que la automatización de los peajes está transformando a las empresas del rubro a lo largo y ancho del planeta, haciéndolas menos burocráticas, más dinámicas y con estructuras muchos menos costosas, el ex referente de Francisco De Narváez se jactó de, no sólo no haber reducido el personal, sino además haber gastado aún más plata en volver a capacitarlos.
