Hola. Soy Ariel Cohen, editor de Finanzas de El Cronista. Gracias por acompañarnos en La City, nuestro newsletter semanal. Llegó la cuarta dosis monetaria, la suba de tasas para atajar la disparada de la inflación, que tocó 6,7% en marzo por la conjunción de los aumentos internacionales y muchos más de consumo interno. Mientras el dólar sigue planchado, y la brecha con tiro corto, la agenda política sigue presionando sobre la economía: la resolución de las tarifas de energía será el catalizador de la interna oficialista pero también de cómo seguirá la economía en este contexto inflacionario. En esta edición de Jueves Santo, abordamos las recetas del Banco Central para contener la inflación y la marcha de su hoja de ruta. Te contamos cómo los bancos vuelven a pagar dividendos y la duda de si esos pesos no meterán presión al dólar. Analizamos cómo la suba de tasas de la Fed le puede pegar al riesgo país de la Argentina. Y finalmente, quiénes son los ganadores y perdedores financieros de la Guerra en Europa. Nos reencontramos el próximo jueves. ----------o---------- GENTE DE LA CITYLos bancos vuelven a pagar y la pregunta es si presionarán al CCLArranca un fenómeno que no se veía desde el inicio de la pandemia y que ahora puede alterar el pacífico mercado cambiario. Esta semana comenzaron a llegar a la Bolsa los comunicados de los bancos con anuncios de pagos de dividendos. Esto estuvo frenado y el Banco Central autorizó a los bancos a distribuir hasta el 20% de las utilidades acumuladas hasta el 31 de diciembre de 2021. Estiman que se trata de unos $ 120.000 millones que no se pagarán todo junto, sino en cuotas mensuales a lo largo de este año. El Banco Galicia comunicó que pagará en cuotas $ 18.000 millones al Grupo Financiero Galicia, que a la vez los distribuirá a sus accionistas, posiblemente en tres pagos, durante mayo, septiembre y enero del año que viene, según pudo saber este diario. Al igual que en el Banco Macro, uno de los accionistas de Galicia es el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la ANSeS, que invertirá ese cobro de dividendos en el inciso L. Allí se establece que el FGS debe invertir el 5% de su cartera en proyectos productivos, de infraestructura, renovables e inmobiliarios. En este último rubro no invertirán: tienen mucho de su cartera por el plan Procrear y además es complejo de calificarse los proyectos. Por lo tanto, planean invertir en proyectos de energía renovable y en gas: YPF, PAE, CGC y Vista es lo que más está mirando el equipo conducido por Lisandro Cleri. La pregunta del mercado es si la distribución de dividendos puede llegar a presionar al dólar financiero, ya que obviamente los accionistas no podrán acceder al mercado único y libre de cambios. "Los extranjeros deben representar un tercio del sistema, y se paga en 12 cuotas, no sé si es tan relevante", tranquiliza un banquero. "Puede presionar en algo, pero también están los bancos públicos y el FGS. La presión en el CCL viene en tres meses cuando termina la liquidación de la cosecha", apunta el CEO de otra entidad. Lo cierto es que el guiño del Banco Central es una buena noticia para los bancos, después de un año y nueve meses en que tuvieron vedado la distribución de utilidades, aunque sea sólo el 20% y en 12 cuotas, protestan. La norma del Banco Central busca garantizar la solvencia del sistema financiero, acompañando el proceso de crecimiento de la actividad que inició la economía después de recuperarse de las consecuencias de la pandemia. De todos modos, las entidades deberán cumplir la integración de capital dispuesta por el comité de Basilea y pedir la autorización del BCRA antes de la distribución de utilidades. Cuando se dispuso, fue una medida destinada a fortalecer la capitalización del sistema financiero adoptada ni bien se inició la pandemia. ----------o---------- SIGNOS DE LOS TIEMPOSLas once medidas del Banco Central contra la inflaciónPor Ariel Cohen En una suerte de considerandos que difundió el Banco Central junto con la decisión de subir las tasas de interés figura oculta una definición estilizada del plan del Gobierno para atacar la inflación. "La suba de tasas es condición necesaria pero, por sí sola, no suficiente para reducir la inflación", dijo la entidad que encabeza Miguel Pesce. Plantea otros diez puntos multicausales, que agrupan medidas macroeconómicas junto con otras de administración monetarias. Es interesante chequear -además de las tasas- el grado de cumplimiento de las metas vinculadas con la actividad del Banco Central. Y cuántas están atadas al futuro de otras áreas.
¿Alcanzará?. ----------o---------- MARKET MAKERSobre llovido, también sube el riesgo argentino por las tasas en EE.UU.Por Julián Yosovitch Con la mayor inflación en los EE.UU., la perspectiva de una Fed más hawkish y una suba de tasas, le sube el piso al riesgo país de la Argentina. Los bonos de la deuda argentina pueden mejorar, pero el contexto global le sube la vara al indicador que mide JP Morgan. La inflación en los EE.UU. se aceleró al 8,5% interanual, la tasa más alta en 40 años. Mientras, el desempleo en EE.UU. bajó al 3,6%, el menor nivel desde el inicio de la pandemia, cerca del pleno empleo. Ahora, la Fed no tiene más argumentos para seguir siendo dovish, sino que le sobran para ser cada vez más hawkish. El mercado espera que la Reserva Federal eleve la tasa de interés en 50 puntos básicos el mes que viene y que la siga subiendo en todas las reuniones del año. Todo dependerá de los datos de inflación y empleo que se vayan publicando. Los rendimientos se han desplazado significativamente al alza en todos los tramos de la curva, pero sobre todo en el tramo corto. Las yields se ubican en su mayor valor en dos años. El riesgo país es, precisamente, el peligro de incumplimiento por encima del implícito en los bonos de los EE.UU., que por definición se presume libre de esa posibilidad. Pero si en los EE.UU. sube la tasa de base, entonces el riesgo país argentino encuentra un piso más elevado. Los bonos argentinos, entonces, pueden ver mejoras y una compresión de spreads ya que sus rendimientos están significativamente elevados y castigados. Un eventual recupero de la deuda argentina enfrenta un contexto adverso y un nivel de riesgo país que de por sí va a ser más alto estructuralmente respecto de lo que era a comienzo de año ya que el piso subió a causa del desplazamiento de la tasa libre de riesgo. Pero la suba de tasas de los bonos del tesoro americano es un viento de frente para la deuda argentina. Si la inflación sigue siendo ascendente y las tasas siguen subiendo, el riesgo país va a ir subiendo escalones conforme lo hagan los rendimientos. Aun con buenas noticias económicas, el riesgo país podría quedarse en estos niveles y que los bonos no mejoren, ya que el factor positivo que haría subir los bonos, choca con el factor negativo que implica la suba de tasas en los EE.UU.. ----------o---------- PROSPECTIVAQué acciones ganan y pierden como en la guerra Rusia-UcraniaPor Martín Burbridge Costumbre bien occidental es la de medir y cuantificar todo, incluso en medio de un conflicto tan sanguinario como el de la invasión rusa a Ucrania: los mercados financieros siguen funcionando y, a casi dos meses del inicio de las hostilidades guerra los inversores y analistas ya saben qué acciones ganan y cuáles pierden... como en la guerra. Los inversores sienten que, como toda crisis, es buen momento para aprovechar algunas oportunidades en renta variable. Cada vez que se dispara una guerra de estas proporciones -la última vez en Europa fue en los '90, cuando se desmembró Yugoslavia-, hay sectores de actividad que salen ganando. En los últimos 60 días, los inversores se mostraron muy activos adecuando sus portafolios, multiplicando los arbitrajes. "El mundo cambió el 24 de febrero, y los mercados se adaptan por lógica a este nuevo contexto", afirmó Catherine Gutierres, analista de Allianz GI. GANADORES Las primeras compañías en aprovechar un auge en sus valores son las vinculadas al sector armamentístico. En ese sentido, están llegando a niveles muy superiores a los que tenían a fines de 2021 los valores de las acciones de empresas estadounidenses y europeas fabricantes de equipos de defensa que se están entregando al ejército ucraniano pero también a países de la Unión Europea que están impulsando el gasto en defensa por el temor de ser atacados por Rusia en el futuro, . Si un país como Alemania decide aumentar su presupuesto en defensa en 100.000 millones de euros para los próximos años, el impacto en los mercados bursátiles es indudable. "La invasión de Rusia a Ucrania ha cambiado fundamentalmente el panorama para el sector militar europeo. Es posible que más inversores acepten que se necesita defensa para preservar la paz y la democracia, lo que impulsaría una recalificación del sector", indicó David Perry, analista del banco JP Morgan. Dos ejemplos sirven para entender la situación: las acciones del fabricante alemán de sensores Hensoldt subieron más de 40%, mientras que las de la fábrica de tanques Rheinmetall, más de un 25 por ciento. También ganan mucho con la guerra las materias primas agrícolas, ya que Rusia y Ucrania son grandes exportadores de trigo y aceite de girasol, dos commodities que se dispararon desde antes de la invasión rusa. Las compañías que comercian estos productos básicos también tienen mucho que ganar en esta coyuntura, como los gigantes Bunge, Cargill y Louis Dreyfus. PERDEDORES En cambio, para los bancos el momento es bastante malo, sobre todo para aquellas entidades que tenían presencia en Rusia, o que poseen activos financieros rusos en sus balances. Société Générale es uno de los bancos más expuestos al mercado ruso, a través de su filial Rosbank, que podría ser expropiada por el gobierno de Vladímir Putin como represalia por las sanciones económicas que le aplica la UE. En EE.UU., el Citigroup ya anunció que su exposición a Rusia alcanzaba los u$s 10.000 millones, a través de bonos de la deuda soberana y demás activos locales. Muy afectado también es el sector automotor europeo. Gigantes como Renault y Volkswagen se ven obligados a detener la producción en un mercado muy importante para ellos como es el ruso. Pero todavía puede ser peor: Rusia y Ucrania proveen elementos como gas neón, paladio y níquel, todos requeridos por la industria automotriz europea en su conjunto. |