¿Qué es lo que está pasando? Muy simple: el gobierno emite sin parar y el Banco Central se quedó sin dólares. Esta combinación nunca termina bien. Para peor, las proyecciones indican que el BCRA deberá seguir emitiendo y no se prevén ingresos de dólares (la reciente baja en las retenciones representa un incentivo ridículamente tenue para motivar liquidaciones por parte del campo).
El gobierno no tiene dólares, pero aún más importante, no tiene credibilidad. Sin eso, no hay plan posible que vaya a funcionar.
Hay escasez de dólares porque en realidad, hay una avalancha de pesos. Veamos cómo está evolucionando la Base Monetaria, que es la oferta de pesos que hay disponibles en el mercado.
Para eso, voy a usar el criterio de “Base Monetaria Ampliada”. Esto incluye la Base Monetaria propiamente dicha (es decir, el dinero que imprime el central) + los Pases + LELIQs + LEBACs.
La base monetaria ampliada nos muestra una medida “más abarcadora” de dinero, porque incluye otras categorías que también hacen a la oferta de dinero y en consecuencia refleja mejor la idea de cuánto se ha inyectado en la economía.
Acá abajo podemos ver la evolución de la Base Monetaria Ampliada. Este es el problema de fondo de la Argentina: |