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La Unión de Recibidores de Granos (URGARA) lanzó este lunes un paro de actividades por 24 horas. La medida, según pudo saber LPO, se tomó por el conflicto salarial que atraviesan los trabajadores con las cámaras que nuclean a los puertos privados.
El dato es que en caso de extenderse el cese de actividades se podría poner en riesgo el principal ingreso de dólares que tiene la Argentina a través de las exportaciones de productos agroindustriales vía las terminales portuarias de Santa Fe y Buenos Aires.
Pablo Palacio, secretario general de URGARA, aseguró que "nos vemos forzados a retomar el conflicto con los empresarios portuarios que pretenden ganancias extraordinarias a costa de los trabajadores que están poniendo el pecho a la pandemia".
"No vamos a renunciar a reclamar mejoras en el poder adquisitivo e insistiremos en la reducción de la jornada laboral, que es algo que venimos pidiendo hace ya mucho tiempo en un sector que hoy está en un año récord de exportaciones", apuntó Palacio.
Este último punto es clave en las negociaciones. URGARA reclama que se reduzca la jornada laboral de las actuales 8 horas a 6 horas por día. Las cámaras empresariales se oponen porque deberían, en este caso, aumentar la plantilla de empleados.
Para modificar este aspecto es necesario modificar el Convenio Colectivo de Trabajo que regula la actividad portuaria. URGARA integra además la Federación Marítima Portuaria (FeMPINRA) y la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT).Estiman que la cosecha agrícola caerá más de 6% en 2021
URGARA indicó que los volúmenes de exportación de granos son récord. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) reveló que durante el primer semestre del año se enviaron al exterior unas 52,5 millones de toneladas (entre soja, maíz, trigo, girasol y cebada).
Este martes por la tarde el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, recibirá -en la sede porteña de la cartera laboral- a los empresarios que representan a los puertos privados y a los líderes de URGARA para intentar destrabar finalmente el conflicto.
El 27 de agosto pasado Moroni dictó la conciliación obligatoria luego de que URGARA anunciara un paro en los puertos agroexportadores. En este último mes se retomaron las negociaciones, aunque, hasta el momento, no hubo acuerdo entre las partes.
La Cámara de Puertos Privados y Comerciales (CPPC) salió al cruce de URGARA. "La medida es un acto de extrema irresponsabilidad. Los trabajadores forman parte de una actividad esencial y tienen elevados salarios", dijo Martín Brindici, gerente de la CPPC.
"Cuando todos los argentinos piden trabajo, hay dirigentes sindicales que van a un paro buscando trabajar menos", disparó Brindici. "Es inadmisible afectar el comercio de granos y el ingreso de dólares por un reclamo caprichoso y fuera de contexto", agregó.
Brindici destacó además que "los salarios de los empleados de URGARA son de los más altos que tiene el sector trabajador en nuestro país" (el sueldo básico de las primeras tres categorías de los recibidores de granos ronda los $ 90.000 por mes).
En septiembre las compañías agroindustriales nucleadas en CIARA-CEC liquidarán alrededor de 1.700 millones de dólares, al tiempo que en los primeros nueve meses de 2020 la liquidación de divisas del sector asciende a 15.000 millones de dólares.
La última vez que URGARA tuvo un conflicto con los empresarios portuarios fue en marzo pasado, al comienzo de la pandemia, cuando anunciaron un paro en reclamo de protocolos y medidas de prevención para evitar contagios de COVID-19 en los puertos.
En ese entonces, Moroni decretó la conciliación obligatoria y el sindicato finalmente decidió levantar la medida de fuerza para evitar exponerse a sanciones. Luego se creó un Comité de Seguimiento encargado de monitorear la situación en las plantas.
