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El diputado nacional Jorge Enríquez sostuvo que "el discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso Nacional pronunciado por el presidente de la Nación, Alberto Fernández fue una nueva oportunidad perdida: una colección de lugares comunes sin ningún dato concreto que marque un rumbo para el desarrollo del país".
"En el inicio, pareció que realizaría una fuerte autocrítica cuando expresó que la palabra se había devaluado, pero luego la devaluó todavía más, trazando un relato abiertamente falso, al ignorar el desastroso panorama económico que dejó el kirchnerismo en 2015. Después se dedicó a reseñar una serie de medidas populistas que adoptó su gobierno y que no hacen más que ahuyentar la inversión, como sucede dramáticamente en Vaca Muerta".
"Como todo populista, a falta de resultados le echa la culpa de la inflación a los 'pícaros', en lugar de trabajar para mejorar de manera sostenible el equilibrio macroeconómico. También sugiere que la deuda de la Argentina se tomó para favorecer a los especuladores, sin explicar que es la contrapartida del déficit crónico que generó el kirchnerismo que él integró. Estos eslóganes le ganan el aplauso fácil de su tribuna, pero le esconden al pueblo argentino los motivos de la crisis"
"Sostiene que no hará ajustes, pero nada dice del brutal ajuste que recae sobre los jubilados".
"Los anuncios sobre el desarrollo de la industria de hidrocarburos y minera fueron sumamente vagos. Esperaremos el envío de los proyectos de ley para pronunciarnos. Debería implicar un cambio copernicano, porque hasta ahora su gobierno solo logró quitar estímulos para esas inversiones".
"Dice que uno de sus objetivos es que el campo crezca, pero no hace más que subirles los costos y las retenciones. Parece una broma macabra".
"Se simula una apertura a la participación con el Consejo Económico y Social, mientras se ningunea al verdadero órgano de la representación democrática, que es el Congreso, con leyes sancionadas en forma exprés, sin debate y con el quórum logrado con un diputrucho".
'' Sus bellas palabras sobre los jueces desmienten lo que el kirchnerismo hizo en toda su historia" . Si fueran sinceras, las celebraría, pero en esta materia es donde más flojo de papeles están''.
"Si realmente se van a transferir competencias ordinarias a la justicia porteña, es algo que sin dudas apoyaremos porque es lo que venimos proponiendo hace un cuarto de siglo, pero con las partidas presupuestarias correspondientes, conforme lo ordena el art. 75, inc. 2 de la CN".
"En lugar de fomentar la unión nacional, insiste con dividir a la sociedad con la iniciativa de legalizar el aborto, en clara contradicción con los preceptos constitucionales consagrados en los arts. 75, incs. 22 y 23. Ignora el rechazo del Congreso y de la mayoría de la sociedad, que quiere preservar las dos vidas".
"En definitiva, un discurso que es una mezcla de falsedades y de grandes propósitos abstractos, que son desmentidos cotidianamente por las acciones de un gobierno centralista y populista, cuyo objetivo central es restringir la independencia judicial y cercenar cada vez más el pluralismo. Un discurso que no convoca al desarrollo con estímulos razonables, sino que no es más que un palabrerío hueco".
