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Correcciones puntuales aparte, la criptomoneda no presenta resistencias importantes hasta la zona de los aproximadamente 12.000 dólares, por donde pasa la directriz bajista.
Hay que reconocer que el futuro del bitcoin se está desplazando con precisión máxima en los últimos meses. De hecho, ha sido saltar por encima de la parte alta del canal bajista y reestructurarse al alza sin muchos problemas. De manera calmada, paso a paso eso sí, pero al fin y al cabo apuntando hacia arriba. Así, en este momento tenemos una zona de resistencia a la vuelta de la esquina, en el entorno de los 10.050 dólares y por encima las inmediaciones de los 12.000 dólares, que es por donde pasa la recta resistencia que une los máximos decrecientes de (máximos históricos) de finales de 2017 y los máximos de 2019 (14.000 dólares). No se puede hablar en realidad de directriz bajista por cuanto solo tenemos dos puntos de toque, y no tres como ha de ser. Pero es cierto que en el entorno de los 12.000 dólares podemos asistir a un recogida de beneficios. Con todo, las zonas de resistencia de verdad son dos: los 14.000 y los 20.000 dólares.
