Los principales acreedores enfrentados con Argentina por la cancelación de deuda impaga dijeron el miércoles ante la justicia de Estados Unidos que llegaron a un acuerdo de 5.000 millones de dólares para resolver un conflicto que mantenía al país marginado de los mercados globales de capitales.
El representante de los fondos dijo que aún faltan detalles para cerrar un trato que será un hito para el nuevo Gobierno argentino, ya que daría oxígeno a una economía que sufre una elevada inflación y un estancamiento de la actividad debido a la escasez de inversiones.
"Hemos llegado a un acuerdo desde el jueves sobre las condiciones económicas con Argentina", dijo Matthew McGill, un abogado que representa a los acreedores Elliott Management y Aurelio Capital Management, en una audiencia ante un tribunal federal de apelaciones en Nueva York.
McGill describió el acuerdo como una "transacción de 5.000 millones de dólares", aunque agregó que las partes necesitan tiempo para concluirlo más allá de la fecha límite del lunes impuesta por Argentina.
"Si tenemos un poco de tiempo podemos concluir el acuerdo", dijo.
Para que el acuerdo quede sellado, el Congreso de Argentina deberá derogar antes dos leyes que impiden realizar nuevas ofertas a los acreedores con deuda en default. El oficialismo descuenta que, aunque no tiene mayoría propia en el Parlamento, tendrá el apoyo de los legisladores opositores.
El Gobierno del presidente Mauricio Macri había anunciado antes de ganar las elecciones en noviembre que buscaría un acuerdo con los fondos llamados "buitres" en Argentina, luego de años de desencuentros con la gestión de su predecesora de centroizquierda, Cristina Fernández de Kirchner.
Argentina había propuesto este mes un pago de unos 6.500 millones de dólares para terminar con la batalla legal con los bonistas conocidos como "holdouts" porque no aceptaron los canjes de deuda impulsados años antes por el país.
Los fondos Montreux Partners y Dart Management, entre otros, aceptaron una oferta que representa un descuento de entre un 27,5 por ciento a un 30 por ciento para los acreedores que presentaron demandas por unos 9.000 millones de dólares.
"El acuerdo es la condición necesaria para que la economía empiece a recuperarse", explicó Maximiliano Castillo, director de la consultora ACM, en Buenos Aires.
Los activos de Argentina recortaban levemente sus pérdidas el miércoles tras el anuncio del preacuerdo.
Argentina declaró una cesación de pagos cercana a los 100.000 millones de dólares en el 2002, en medio de una grave crisis económica y social.
El ministro argentino de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, precisó el lunes que la suma en manos de acreedores que habían quedado fuera de los dos canjes de deuda ofrecidos por Argentina totaliza alrededor de 20.000 millones de dólares.
Una portavoz del Ministerio de Hacienda de Argentina dijo a Reuters que cualquier acuerdo entre las partes debe ser informado por el mediador judicial, Daniel Pollack.
Mark Brodsky, el presidente de Aurelius, declinó hacer comentarios a través de un portavoz. Mientras que las llamadas hechas a Elliott Management no fueron respondidas de inmediato.
reuters