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El Comité de Coordinación Macroeconómica de Uruguay, integrado por el Banco Central y el Ministerio de Economía, resolvió elevar las restricciones para el ingreso de capitales especulativos del exterior para morigerar la apreciación de la moneda local frente al dólar y acotar la consecuente pérdida de competitividad.
Por ello, el Banco Central del país vecino subirá del 40 al 50 por ciento el encaje (inmovilización de fondos) que rige para la compra por parte de no residentes de los instrumentos emitidos por la autoridad monetaria, y lo extenderá a los títulos emitidos el mercado doméstico tanto en pesos uruguayos como en Unidades Indexadas.
Además, el Gobierno de José Mujica resolvió que a partir de julio el Banco Central abandone su política de fijación de tasa de interés de referencia y aplique un esquema de manejo de agregados monetarios, que consiste en el control de la cantidad de pesos en circulación.
También, desde agosto del año próximo el rango objetivo de inflación irá de 3 a 7 por ciento, contra el actual de entre 4 y 6 por ciento. En el lapso de 12 meses terminado en mayo pasado, la inflación resultó de 8,06 por ciento.
La entrada de divisas a Uruguay, después que a principios de 2012 su calificación fuera elevada a "grado de inversión", deprimió el precio del dólar en la plaza uruguaya al punto de poner en riesgo algunos "equilibrios macroeconómicos" y afectar la competitividad exportadora, justificó el ministro de Economía uruguayo, Fernando Lorenzo, al anunciar las medidas.
Además, el Gobierno de José Mujica resolvió que a partir de julio el Banco Central abandone su política de fijación de tasa de interés de referencia y aplique un esquema de manejo de agregados monetarios, que consiste en el control de la cantidad de pesos en circulación.
También, desde agosto del año próximo el rango objetivo de inflación irá de 3 a 7 por ciento, contra el actual de entre 4 y 6 por ciento. En el lapso de 12 meses terminado en mayo pasado, la inflación resultó de 8,06 por ciento.
La entrada de divisas a Uruguay, después que a principios de 2012 su calificación fuera elevada a "grado de inversión", deprimió el precio del dólar en la plaza uruguaya al punto de poner en riesgo algunos "equilibrios macroeconómicos" y afectar la competitividad exportadora, justificó el ministro de Economía uruguayo, Fernando Lorenzo, al anunciar las medidas.
nosis
