1. El "precipicio fiscal" será un fiasco en el corto plazo. Dolorosamente, este hecho ha sido el foco de los expertos en los últimos meses. No se ha alcanzado un acuerdo después de mucho tiempo de negociaciones, y ya no hay días en 2012 para que se logre.
Aunque todavía hay alguna posibilidad de acuerdo antes de 2013, aunque vayamos al precipicio los efectos serán a corto plazo. El mundo no va a terminar y el Dow Jones no va a ir a los 5.000 puntos.
Puede haber algo de volatilidad, pero esto va a terminar siendo una versión más moderna del efecto 2000. Mis temores a más largo plazo se deben al gasto y a la deuda insostenible, no al precipicio fiscal.
2. El oro y la plata brillarán. Aunque el rendimiento global de los metales en el año 2012 fue decepcionante, sigo creyendo que lo van hacer bien en 2013 en un escenario en el que se mantendrá la incertidumbre política en EE.UU. y que continuarán funcionando las imprentas de dinero.
Algunos alcistas están empezando a desaparecer, pero no creo que la carrera haya terminado. Veo el oro en los 2.000 dólares onza y la plata en los 40 dólares en algún momento de 2013.
3. Cuidado con las acciones de restauración. He sido alcista en los restaurantes en gran parte de los últimos cuatro años, pero estoy preocupado por el sector en 2013. Los crecientes costos de materias primas presionarán los márgenes o se verán obligados a aumentar los precios de los menús. La pregunta es si los consumidores estarán dispuestos a pagar esos nuevos precios. Creo que seguirán comiendo fuera, pero no tanto.
4. Productos agroalimentarios, madera, agua y otros activos tangibles deben hacerlo bien en 2013. Me sigue gustando la agricultura, donde podemos tener exposición a traves de nombres como Alico (ALCO), Limonera (LMNR), o la empresa argentina Cresud (CRESY). También hay ETFs que tienen activos de este mercado.
La madera ha sido un excelente activo en los últimos años, con una baja correlación a la renta variable. Podemos tener exposición a la madera a través de Plum Creek Timber (PCL), Rayonier (RYN) y Weyerhauser (WT), o mediante el iShares S&P Global Timber & Forestry Index ETF (WOOD), que posee una interesante variedad de activos.
Puede haber algo de volatilidad, pero esto va a terminar siendo una versión más moderna del efecto 2000. Mis temores a más largo plazo se deben al gasto y a la deuda insostenible, no al precipicio fiscal.
2. El oro y la plata brillarán. Aunque el rendimiento global de los metales en el año 2012 fue decepcionante, sigo creyendo que lo van hacer bien en 2013 en un escenario en el que se mantendrá la incertidumbre política en EE.UU. y que continuarán funcionando las imprentas de dinero.
Algunos alcistas están empezando a desaparecer, pero no creo que la carrera haya terminado. Veo el oro en los 2.000 dólares onza y la plata en los 40 dólares en algún momento de 2013.
3. Cuidado con las acciones de restauración. He sido alcista en los restaurantes en gran parte de los últimos cuatro años, pero estoy preocupado por el sector en 2013. Los crecientes costos de materias primas presionarán los márgenes o se verán obligados a aumentar los precios de los menús. La pregunta es si los consumidores estarán dispuestos a pagar esos nuevos precios. Creo que seguirán comiendo fuera, pero no tanto.
4. Productos agroalimentarios, madera, agua y otros activos tangibles deben hacerlo bien en 2013. Me sigue gustando la agricultura, donde podemos tener exposición a traves de nombres como Alico (ALCO), Limonera (LMNR), o la empresa argentina Cresud (CRESY). También hay ETFs que tienen activos de este mercado.
La madera ha sido un excelente activo en los últimos años, con una baja correlación a la renta variable. Podemos tener exposición a la madera a través de Plum Creek Timber (PCL), Rayonier (RYN) y Weyerhauser (WT), o mediante el iShares S&P Global Timber & Forestry Index ETF (WOOD), que posee una interesante variedad de activos.
Jonathan Heller