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El poder legislativo de la Ciudad de Buenos Aires expreso su más enérgico rechazo a la decisión de la Asamblea Legislativa de las Islas Malvinas, de convocar a un referéndum en 2013, para que los isleños voten su estatus político.
El Proyecto, presentado por el Diputado porteño por el PRO, Daniel Lipovetzky, y aprobado ayer por unanimidad en el recinto, sostiene que es una medida provocadora que viola los principios del derecho internacional, y la considera improcedente jurídicamente y vejatoria sobre la soberanía argentina de las Islas Malvinas.
El documento expone, que en el caso de Malvinas, ha quedado claramente expresado el principio de la integridad territorial por la Asamblea General de las Naciones Unidas, que el 16 de diciembre de 1965 (Principio confirmado en 1973 y 1976), ha requerido a los Gobiernos de la Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. a proseguir sin demora las negociaciones en cuestión de soberanía y transferencia de territorio, y se han negado a aceptar los efectos de un referéndum o consulta a los actuales habitantes de esas regiones.
En tal sentido, la presentación menciona que es inaplicable el derecho del principio de libre determinación de los isleños, recordando, a través de los aspectos históricos del conflicto, que en 1833 los ingleses intervinieron en las Malvinas, ocupadas hasta esa fecha por Argentina e inicia desde 1834, la colonización inglesa en el territorio.
Destaca, además, que el último censo realizado en las islas, demuestra que el 95 por 100 de la población es de origen británico, por lo que se descarta el derecho de autodeterminación, ya que de acuerdo al origen de la misma se puede prever el resultado.
