La presidenta Cristina Fernández de Kirchner adelantó anoche, en el 59° encuentro de la Cámara de la Construcción (CAC), que buscará modificar la ley de Riesgos del Trabajo para evitar la "doble vía" y terminar con la "industria del juicio", y aseguró que la Casa Rosada seguirá apostando a la obra pública como motor del crecimiento económico.
La Presidenta cerró el encuentro que se realizó en el salón Libertador del hotel Sheraton, y volvió a pedir ayuda a los hombres de negocios porque "sola no puedo".
"La inversión en ladrillos es la más segura para todos los argentinos", consideró Cristina Fernández de Kirchner.
La jefa de Estado pidió además que se reduzcan las importaciones al mínimo, en lo que fue otro gesto de acercamiento a los industriales, luego del respaldo que les había dado el martes pasado ante la Unión Industrial Argentina (UIA).
Por otro lado, la Presidenta explicó que la quita de subsidios no será una medida de ahorro para el Estado sino una "reorientación eficiente de los recursos".
La demora de más de dos horas en la llegada de la Jefa de Estado al Sheraton, había empezado a generar malestar entre los empresarios, que quedó despejado con la promesa de modificar la ley de ART para que la Justicia no haga lugar a los reclamos de los trabajadores que ya cobraron indemnizaciones.
"Ahora tenemos que abordar el problema de las ART. Es clave que la ley contemple los intereses de los trabajadores, pero evitando la industria del juicio, que genera un impacto negativo", sostuvo la Presidenta.
Fuentes oficiales aseguraron que se está analizando crear una fórmula para ir subiendo los topes indemnizatorios y desincentivar los reclamos jurídicos. "Lograr un acuerdo para evitar la doble vía sería un salto cualitativo", consideró Cristina Fernández de Kirchner.
Por otro lado, la Jefa de Estado volvió a mostrarse distante de Hugo Moyano, titular de la Confederación General del Trabajo (CGT) y elogió a la Unión Obreros de la Construcción (Uocra): "Esta actividad tiene el mayor grado de armonización entre los empresarios y los trabajadores", sostuvo.
En otro gesto de apoyo a Gerardo Martínez, titular de la UOCRA, la Presidenta le preguntó cuántos afiliados tenía en 2003 y cuántos en 2011. Y él respondió que había pasado de 75.000 a más de 500.000 gracias al crecimiento de la construcción.
Por otro lado, a sólo dos días de su encuentro con Dilma Rousseff, presidenta de Brasil, la Jefa de Estado reclamó que ese país permita el ingreso de inversiones de empresas argentinas.
En ese sentido, Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que "no podemos dejar de mencionar que dos de las principales obras públicas de Aysa están haciéndose a través de empresas de Brasil. Sabemos que ahora viene el Mundial de Fútbol y las Olimpíadas, por lo que creemos que sería una buena oportunidad para que nuestras empresas puedan participar de las obras".
nosis
La Presidenta prometió cambios a ley de ART
noviembre 30, 2011