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Corea del Norte robó más criptomonedas en 2022 que cualquier otro año, reveló un informe de la ONU.
El informe de la ONU se presentó la semana pasada a un comité de sanciones de Corea del Norte que conforman 15 miembros.
Allí se encontró que los hackers vinculados a Corea del Norte fueron responsables.
De entre US$ 630 millones y más de US$ 1.000 millones en criptoactivos que se robaron el año pasado.
Después de atacar las redes de compañías aeroespaciales y de defensa extranjeras.
El informe de la ONU también señaló que los ciberataques fueron más sofisticados que en años anteriores.
Lo que dificultaba más que nunca el rastreo de los fondos robados.
La semana pasada, un informe de la empresa de análisis blockchain Chainalysis llegó a una conclusión similar.
Vinculando a los hackers norcoreanos con al menos US$ 1.700 millones en criptomonedas que se robaron en 2022.
Lo que lo convierte en el peor año de la historia para los hackeos de criptomonedas.
La firma nombró a los sindicatos de ciberdelincuentes como los «hackers de criptomonedas más prolíficos de los últimos años».
Según Chainalysis, al menos US$ 1.100 millones del botín que se robó procedían de hackeos de protocolos financieros descentralizados.
Lo que convierte a Corea del Norte no solo en uno de los países que más robó.
Sino en una de las fuerzas motrices de la tendencia de hackeos de DeFi, que se intensificó en 2022.
La firma también descubrió que los hackers vinculados a Corea del Norte tienden a enviar grandes sumas a mezcladores como Tornado Cash y Sinbad.
Corea del Norte negó con frecuencia las acusaciones de ser responsable de ciberataques.
Pero el nuevo informe de la ONU afirma que la principal oficina de inteligencia norcoreana, la Oficina General de Reconocimiento, utiliza varios grupos como Kimsuky, Lazarus Group y Andariel específicamente para ciberataques.
Fuente: Cointelegraph
