El sector de Economías Regionales de la Confederación
Argentina de la Mediana Empresa (CAME) solicitó la declaración de emergencia agropecuaria para las
provincias de Buenos Aires, Mendoza, Misiones, Córdoba, La Pampa y Santiago del Estero.
Tras reunirse con representantes de cada uno de los distritos, la Comisión de CAME estudió el
impacto de las inclemencias climáticas en los cultivos. En Buenos Aires, se observaron daños
provocados por la sequía y no pudieron determinar las fechas precisas para la declaración de
emergencia.
Para Mendoza, se sugirió la declaración del 1 de enero de 2023 hasta el 31 de marzo de 2024, para
las explotaciones agropecuarias afectadas por granizo
2024 para las explotaciones ganaderas, caprinas, bovinas, equinas, ovinas y apícolas, afectadas por
sequía.
Para Misiones, del 27 de enero de 2023 al 26 de julio de 2023, para explotaciones agropecuarias
afectadas por granizo y fuertes vientos. En tanto, para La Pampa, se sugirió del 1 de diciembre de
2022 hasta el 31 de marzo de 2023, para las producciones frutihortícolas y vitivinícolas afectadas
por heladas.
Luego, para Córdoba, se pidió la declaración de emergencia del 1 de enero de 2023 al 31 de
diciembre de 2023, para las explotaciones ganaderas, tamberas y apícolas afectadas por sequía y
del 1 de enero de 2023 al 30 de junio de 2023, para las explotaciones agrícolas, forestales y
frutihortícolas que se han visto alcanzadas por los efectos de la sequía.
Finalmente, en Santiago del Estero, se sugirió por sequía desde el 1 de febrero de 2023 hasta el
31 de enero de 2024, para las explotaciones hortícolas, frutihortícolas (recomendación de CAME
para no dejar afuera a ninguna producción), apícolas, maíz, girasol, trigo, algodón sorgo,
forrajeras de grama, gatton, alfalfa y buffel, ganaderas de ganado mayor y menor (de carne y leche).
Agencia CMA Safras