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El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo el lunes a los países reunidos en el inicio de la cumbre COP27 en Egipto que se enfrentan a una dura elección: trabajar juntos ahora para reducir las emisiones o condenar a las generaciones futuras a una catástrofe climática.
El discurso pretendía establecer un tono urgente mientras los Gobiernos se sientan a dialogar durante dos semanas sobre cómo evitar los peores impactos del cambio climático, aunque estén distraídos por la guerra de Rusia en Ucrania, la galopante inflación al consumo y la escasez de energía.
"La humanidad tiene una opción: cooperar o perecer", dijo Guterres a los delegados reunidos en la ciudad turística de Sharm el-Sheij. Está previsto que los líderes de países como Reino Unido y Arabia Saudita hablen más tarde.
Guterres pidió un pacto entre los países más ricos y más pobres del mundo para acelerar la transición de los combustibles fósiles y acelerar la entrega de la financiación necesaria para garantizar que los países más pobres puedan reducir las emisiones y hacer frente a los impactos inevitables del calentamiento que ya se ha producido.
"Las dos economías más grandes —Estados Unidos y China— tienen una responsabilidad particular de unir esfuerzos para hacer de este pacto una realidad", dijo.
Guterres pidió a los países que se pongan de acuerdo para eliminar el uso del carbón, uno de los combustibles más intensos en carbono, para el año 2040 en todo el mundo, y que los miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) alcancen esa meta para el año 2030.
A pesar de décadas de conversaciones sobre el clima —la COP de Egipto es la 27ª conferencia—, los avances han sido insuficientes para salvar al planeta del calentamiento excesivo, ya que los países son demasiado lentos o reacios a actuar, señaló.
"Las emisiones de gases de efecto invernadero siguen creciendo. Las temperaturas globales siguen aumentando. Y nuestro planeta se acerca rápidamente a puntos de inflexión que harán irreversible el caos climático", dijo. "Estamos en una autopista hacia el infierno climático con el pie en el acelerador".
Los signatarios del acuerdo climático de París de 2015 se comprometieron a alcanzar el objetivo a largo plazo de evitar que la temperatura global aumente más de 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
Los científicos han fijado esta cifra como el límite máximo para evitar un cambio climático catastrófico.
Guterres dijo que para mantener alguna esperanza de cumplir ese objetivo hay que conseguir que las emisiones netas mundiales sean cero en 2050.
"Es un Pacto de Solidaridad Climática o un Pacto de Suicidio Colectivo", dijo.
reuters
