Se espera que la producción de biodiesel de Argentina alcance
los 2.100 millones de litros en 2022, frente a los 1.960 millones de litros del año anterior. La
información es del Gain Report, del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).
Las exportaciones deberían caer de 1440 millones en 2021 a 1200 millones en 2022. El consumo
debería aumentar de 500 millones de litros a 920 millones de litros. Se espera que las existencias
finales disminuyan de 118 millones de litros a 98 millones de litros.
Se prevé que el consumo de biodiésel en 2022 continúe su recuperación después de un 2020 muy
malo y un 2021 muy afectado por la pandemia de COVID-19.
También se espera que el consumo de diésel en carretera y fuera de carretera (incluidos los
biocomponentes) continúe su recuperación, aumentando un 6 % en 2022. Los principales impulsores de
este crecimiento son económicos, una política oficial de subsidio a los precios de la energía que
respalda el aumento de la demanda, y precios de combustible significativamente más bajos que en los
países vecinos, lo que se traduce en grandes ventas en las ciudades.
El régimen de control de divisas de Argentina también ha creado oportunidades para el arbitraje de
divisas que fomentan estas compras transfronterizas de combustible. Las importaciones inferiores a
las necesarias y el aumento de la demanda provocaron una escasez de diésel.
Agencia SAFRAS