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Roberto Palacios, vecino y dueño de un campo lindero a la toma de terrenos de Los Hornos, dialogó con RADIO REALPOLITIK FM (www.realpolitik.fm) y dejó duras declaraciones respecto a quienes se encuentran ocupando los espacios del predio fiscal que se encuentra en proceso de urbanización.
Roberto Palacios tiene cuatro hectáreas que dan a la calle 155, al fondo de la megatoma que se está llevando adelante en el ex Club de Planeadores. Él es uno de los vecinos que luchan por que la justicia tome cartas en el asunto y regularice la situación del espacio tomado.
En esta línea, denunció los hechos que viven las personas cuyas casas se encuentran en las adyacencias al predio. “Tuve cortes de alambre constantes. Además, un amigo me dijo que todo el fondo ya tenía pastos de un metro de altura que ya no se encuentran porque desmalezaron todo, por lo que entendemos que podríamos estar al borde de la usurpación".
Asimismo, aclaró que su lucha como vecinos "ya lleva más de dos años desde que se empezó con el tema de la pandemia y gracias a dios se mediatizó". Y agregó: "Yo no quiero entrar en la discusión de la gente que no tiene vivienda, que de eso se deben encargar los políticos, sino que yo hablo del perjuicio que sentimos nosotros porque se nos desvalorizan las tierras".
En este sentido, contó la experiencia de otro colindante: "Yo tengo un vecino que tenía chanchería y le robaron todos los chanchos durante este periodo, teniendo que dejar de trabajar. Hay gente buena y mala, pero la casualidad es que nunca lo habían robado y en estos dos años le desaparecieron prácticamente todos los chanchos. Esta persona se cansó, vendió su tierra y lo hizo por casi la mitad del valor".
Y volvió a insistir con respecto a la pérdida del precio de sus tierras: "Sentimos como que se nos desvaloriza lo nuestro, cuando de ARBA por bimestre me viene 7 mil pesos, un valor que ya la tierra no tiene por estar al lado la megatoma".
A su vez, consideró lo peligroso que puede ser urbanizar una zona tan baja: "Desde el medio de mi campo se ven prácticamente los techos de la megatoma, o sea que para mí es una cacerola, porque es muy inundable y si tenemos una tormenta parecida a la del 2 de abril no sé qué podría pasar. Si se hacen las cosas bien y se urbaniza haciendo un control sobre la gente que está adentro vendría bien".
También, comentó la sensación de quienes tienen negocios en la cercanía: "Ayer escuchaba que los comerciantes de la zona estaban contentos porque tenían un gran flujo de vecinos, pero habría que buscar la vuelta y reorganizarlos, más allá que gendarmería rodea la zona y no interfiere". Y remató: "Este es un comentario medio nazi, pero para mí es un aguantadero de gente del conurbano".
Finalmente, cerró el vecino hornense: "Yo sé que hay muchas cocinas de drogas, tengo conocidos que me dicen que es terrible como se vende droga, que hay mucha gente con antecedentes penales, pero si se hiciera un seguimiento, un control y entrara la policía para ver si los vecinos realmente suman estaría bueno".
