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Ucrania acusó el jueves a Rusia de robar grano en el territorio que ha ocupado, un acto que, según dijo, aumenta la amenaza para la seguridad alimentaria mundial que suponen las interrupciones de la siembra de primavera y el bloqueo de los puertos durante la guerra.
Cuando se le consultó por las acusaciones, el Kremlin dijo no tener información al respecto.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano dijo en una declaración escrita que "condena enérgicamente las acciones criminales de la Federación Rusa en la llamada expropiación de las cosechas de los agricultores en la región de Jersón" en el sur de Ucrania.
No dio más detalles sobre el supuesto robo de grano en Jersón, cuya principal ciudad está ocupada por las fuerzas rusas desde los primeros días de la invasión rusa el 24 de febrero.
"El saqueo del grano de la región de Jersón, así como el bloqueo de los envíos de los puertos ucranianos y el minado de las rutas marítimas, amenazan la seguridad alimentaria del mundo", dijo.
"Exigimos que Rusia detenga el robo ilegal de grano, desbloquee los puertos ucranianos, restablezca la libertad de navegación y permita el paso de los buques mercantes".
La Fiscalía General de Ucrania dijo en otro comunicado que había abierto una causa penal por las acusaciones de que soldados rusos, amenazando con violencia, se habían llevado el 26 de abril 61 toneladas de trigo de una empresa agrícola en la región de Zaporiyia, en el sur de Ucrania.
Reuters no pudo verificar inmediatamente esta afirmación.
Cuando Reuters le preguntó si el Kremlin tenía alguna información sobre las acusaciones de Ucrania, el portavoz Dmitry Peskov dijo a través de la aplicación de mensajería Telegram: "No. No sabemos de dónde viene esta información".
Según los datos del Consejo Internacional de Cereales, Ucrania fue el cuarto exportador mundial de grano en la temporada 2020/21, vendiendo 44,7 millones de toneladas al extranjero. El volumen de las exportaciones ha caído bruscamente desde la invasión rusa.
"Con sus acciones ilegales, Rusia está robando no solo a Ucrania, sino también a los consumidores en el extranjero", dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania.
"Las Naciones Unidas estiman que alrededor de 1.700 millones de personas pueden enfrentarse a la pobreza y el hambre debido a las interrupciones al envío de alimentos como resultado de una guerra a gran escala llevada a cabo por Rusia contra Ucrania".
reuters
