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Se trata de Grupo Valber SRL, que en enero fue denunciada por sus propios empleados tras no pagar salarios ni aguinaldos. Además, entregó más de 450 cheques sin fondos por un valor que asciende a los 33 millones de pesos.
A pesar de encontrarse sumido en una crisis económica y productiva a la que cuesta encontrarle precedentes inmediatos, el gobierno pareciera decidido a continuar derrochando el dinero de las arcas públicas en objetos que difícilmente resulten indispensables. Los ejemplos de ello se acumulan unos sobre otros, pero en las últimas jornadas hubo dos que llamaron la atención, protagonizados por el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el ministro del Interior, Wado de Pedro.
El primero decidió gastar algo más de 1.5 millones de pesos en adornar las barandas del décimo piso del edificio en el que se encuentran sus oficinas con algunas plantas de estación. De Pedro fue, sin embargo, el que terminó despegándose con una licitación que despertó una fuerte polémica.
El ministro del Interior se despachó con un gasto de 2 millones de pesos en un servicio de cátering. De acuerdo al número de proceso 81-0027-CDI21, De Pedro contratará un servicio de viandas para colación y almuerzo que irá a parar al personal afectado a la mudanza del Archivo General de la Nación, y tendrá una duración de seis meses.
Para la compulsa se presentaron dos empresas. Maximia SA, que ofertó 2.149.200 de pesos y Grupo Valber SRL, que presentó 2 millones. Fuentes oficiales aseguraron que, de acuerdo al criterio del precio más conveniente, se le adjudicará el servicio al Grupo Valber, que se encuentra denunciado por sus propios trabajadores.
En efecto, en enero de este mismo año sus empleados aseguraron que la empresa, a pesar de ganar ininterrumpidamente millonarias licitaciones, registraban mora en aportes patronales, salarios y aguinaldos, además de tener 470 cheques rechazados por algo más de 33 millones de pesos. A pesar de ello, el ministro De Pedro beneficiaría a la empresa con otra millonaria contratación.
Las viandas de colación que deberá entregar serán, en el mejor de los casos, magras. La polémica empresa podrá optar por un yogurt, una barra de cereal, un sándwich, dos medialunas o un alfajor. Cualquiera de las opciones será aceptado. Además, deberá incorporar una fruta de estación y una botella de medio litro de agua sin gas.
Las del almuerzo tendrán un plato principal de 500 gramos y dos pequeños panes. Además, deberá ser congruente con el clima y se completará con un postre y una botella de medio litro de agua saborizada.
