https://mail.google.com/mail/u/0/?ui=2&ik=3ab76eea9c&view=att&th=1648a6d4d6c2fa40&attid=0.1&disp=safe&zw
BYMADATA - Cotizaciones en Tiempo Real | BYMA Bolsas y Mercados Argentinos

Proyecciones fallidas de Guzmán y cambios de funcionarios, las dos claves que favorecerían a la Argentina

 La renegociación con el FMI, marcada por el cambio de los negociadores, un informe interno que no se difundiría, lo que no le aceptarán a Guzmán


Las proyecciones macroeconómicas para el año próximo que el ministro Martín Guzmán incluyó en el Proyecto de Presupuesto 2022 y se presentarán esta semana al staff del organismo, al parecer deberán ser modificadas.

La principal variable que no está alineada de acuerdo a la opinión de varios economistas consultados por iProfesional es la tasa de inflación que proyecta el Gobierno para 2022.

Los negociadores argentinos llevaron una proyección mejorada del 40 por ciento anual que modifica el 33% inicial que se puso en el presupuesto. Los funcionarios del FMI consideran que ese número está por debajo del real

El viernes pasado el Banco Central (BCRA) publicó el Relevamiento del Estimador Mensual (REM) de noviembre donde se muestra que la inflación esperada por bancos y consultoras será 52,1%.

Los analistas del caso argentino en el FMI tampoco están de acuerdo en cómo se financiará el déficit primario del 3,3 por ciento del PBI de 2022. 

Guzmán buscaría financiar una parte con fondos recibidos de préstamos de organismos multilaterales como el BID, el Banco Mundial y CAF pero desde el FMI sostienen que sería mejor aumentar los ingresos corrientes

Por eso no hay que descartar la posibilidad que el Gobierno incluya en las modificaciones que se harán en el Congreso de la Nación al Proyecto de Presupuesto 2022 que se pague nuevamente el año próximo el llamado Impuesto a la Riqueza con el que hasta ahora se recaudaron más de 220.000 millones de pesos.

En el equipo económico sostienen que el déficit de 3,3% en 2022 es financiable y se haría de la siguiente manera: un 1,8% con emisión monetaria; otro 2,6% con colocación de emisiones de deuda publica en el mercado; y un 2,4% con deuda de los organismos. Esta última financiación es la que el FMI rechazaría.

Al respecto, el economista Federico Fusiase, de la consultora Anker que lidera el ex ministro Luis Caputo, explicó que Guzmán "no solo cuenta con el 1,8% previsto por la Carta Orgánica de adelantos transitorios que el BCRA le gira al Tesoro, además tiene un plus de 1,2% provisto de los DEG que el FMI dio este año".

"La duda es si el Fondo aprobará un programa que tenga una financiación del déficit tan alta con emisión monetaria, 3% del PBI", dijo Furiase. 

Por otro lado, un informe de la consultora Econviews señaló que "la ecuación es difícil porque la Argentina quiere el ajuste más suave posible. El directorio no se va a exponer aprobando un programa totalmente "light" porque esos programas en general fracasan. Debe ser un programa que genere credibilidad y que sea vendible al Directorio". 

Lo que se podría estimar es que ese tipo de financiamiento tendría implícito algunos desembolsos del FMI en forma de endeudamiento. 

Los analistas del caso argentino en el FMI tampoco están de acuerdo en cómo se financiará el déficit primario del 3,3 por ciento del PBI de 2022
Analistas del caso argentino en el FMI no están de acuerdo en cómo se financiará el déficit primario del 3,3% del PBI de 2022

Esto le sumaría nuevos condicionantes a la negociación porque por una parte el FMI presentará mayores exigencias fiscales en caso que el Gobierno quiera fondos frescos.

Se sumaría también un nuevo factor para acelerar la negociación ya que una parte importante del programa financiero del Gobierno explicitado en el Proyecto de Presupuesto dependería, en términos de financiamiento, de dichos desembolsos. 

La Argentina necesita un acuerdo con el FMI porque no tiene dinero para pagar los vencimientos de deuda. Las reservas habrían cerrado noviembre en torno a los u$s 4.600 millones mientras que, los vencimientos en dólares hasta el 22 de marzo de 2022 llegan a unos u$s 6.700 millones. 

El 31 de marzo del año próximo habría que pagar un vencimiento con el Club de París por unos u$s 2.000 millones.

El staff del FMI ya tiene escrito una especie de borrador del análisis técnico realizado sobre las consecuencias económicas y financieras del crédito de 44.000 millones de dólares concedido al gobierno de Mauricio Macri cuyos principales aspectos ya se han difundido pero la novedad es esa evaluación secreta que se ha filtrado desde Washington.

Por ese motivo dentro del FMI se ha iniciado una especie de auditoría interna para saber desde dónde se podría haber filtrado esa información que apareció el mismo día que el presidente Alberto Fernández solicitó un informe de esas características en la Conferencia de Unión Industrial Argentina (UIA) el jueves pasado. 

"Le pedimos al FMI que antes de que cerremos un nuevo acuerdo, haga su evaluación de lo que fue el fallido programa Stand-By por el que se desembolsaron 44.500 millones de dólares que se mal utilizaron en pagar deuda insostenible y en financiar salida de capitales. Eso nos va a ayudar a terminar de entendernos. Es un paso necesario en este camino", sostuvo el Presidente ante la UIA. 

Pero de acuerdo a lo que pudo investigar iProfesional será difícil que el FMI dé a conocer en forma pública este informe.

Los directivos del FMI consideran que se trató de una decisión tipo "by the book" donde la evaluación del uso de los dólares y las consecuencias económicas y financieras del crédito que Mauricio Macri fue por una orden política manejada directamente por el entonces presidente de los EEUU Donald Trump junto a sus dos funcionarios de confianza que estaban en el FMI: David Lipton quien ahora es el número dos del Tesoro Americano; y Mauricio Claver el actual director del BID.

Para conceder un nuevo crédito como el Extended Fund Facility a 10 años con 4 de gracias que quiere la Argentina el board del FMI tiene que recibir una evaluación técnica de lo que sucedió con el anterior. Esto implica analizar cómo se utilizaron los 44.500 millones de dólares que se otorgaron a Macri y su administración. 

Por ese motivo el economista noruego Odd Per Brekk, el actual vicejefe del Departamento de Asia y Pacífico del organismo multilateral a pedido de Julie Kozack la subdirectora en el Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, realizo ese trabajo secreto. 

Brekk que nunca estuvo asignado ni conoce América Latina, escribió un informe de más de 100 páginas que el board del FMI está analizando pero que tal vez no se dé a conocer en forma pública como solicita el Gobierno argentino.

Este informe señala que Mauricio Macri obtuvo un crédito Stand-By por la decisión de Trump, y en ese FMI influían dos altos funcionarios que hoy ocupan puestos claves en Washington: David Lipton y Mauricio Claver. 

Lo que sí ya ha trascendido puertas afuera del FMI, es que el informe no se mencionara a Lipton y Claver que fueron los funcionarios que presionaron en el FMI para que se concediera el crédito lo más rápido posible. 

¿Algo a favor de Argentina?

Otra de las novedades a favor de la posición argentina es que varios de los funcionarios considerados de los duros y que fueron claves para impedir que la Argentina logre una renegociación rápida del acuerdo, han sido desplazados de sus puestos; y otros sorpresivamente que mostraban una posición más favorable a un acuerdo más rápido, han sido ascendidos sorpresivamente. 

Este es el caso de la economista indio estadounidense Gita Gopinath quien hasta la semana pasada ocupaba el cargo de Consejera Económica y Directora del Departamento de Estudios Económicos del FMI. 

Fue designada a fines de la semana pasada como la primera vicedirectora del FMI de la historia. Por primera vez también en la historia el organismo tiene a dos mujeres en sus puestos más relevantes

Lo sospechoso del nombramiento de Gopinath es que el martes 21 de octubre pasado el FMI anunció a través de un comunicado de prensa la salida de la economista del FMI luego de permanecer tres años en el organismo.  

"La directora del departamento de Investigación Económica del FMI, Gita Gopinath, de origen indio, dejará el FMI el próximo enero y se reincorporará al departamento de Económicas de la Universidad de Harvard, como estaba previsto. La universidad amplió su excedencia por motivos excepcionales un año, que se cumple a finales de diciembre", decía el comunicado.

Pero, sorpresivamente, dos meses después la economista ha sido designada como la nueva vicedirectora del FMI y reemplazará a uno de los duros el economista británico Geofrey Okamoto que se retira del organismo financiero internacional luego de haber ganado mucho poder tras el escándalo de las estadísticas de China que involucró a Giogieva.

También llegará en enero al FMI el economista brasileño Ilan Goldfajn que estará al frente del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI y tendrá a su cargo la negociación con los funcionarios argentinos. El brasileño reemplazará a otro de los involucrados en el caso argentino el economista chileno Alejandro Werner quien se retira de la actividad.

La Directora Gerente del FMI, Kristalina Georgieva, siempre quiso a Gopinath, "su contribución al FMI ha sido verdaderamente remarcable y su impacto en el trabajo del FMI, enorme". 

"Ha hecho historia como la primera mujer economista jefa y todos nos hemos beneficiado de su aguda inteligencia y su profundo conocimiento de las finanzas internacionales y la macroeconomía mientras navegamos a través de la peor crisis económica desde la Gran Depresión", reza el mensaje de despedida de Georgieva, según el comunicado difundido por la entidad el 21 de octubre. 

Gopinath fue coautora del Documento sobre la Pandemia, una hoja de ruta para vacunar al mundo. 

El documento condujo a la creación de un grupo de trabajo multilateral, integrado por el FMI, el Banco Mundial, la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para vehiculares respuestas a la emergencia sanitaria mediante la colaboración con los fabricantes de vacunas para identificar barreras comerciales, cuellos de botella en el suministro y acelerar la entrega de viales a países de ingresos bajos y medios.

Kristalina Georgieva, directora del FMI
Kristalina Georgieva, directora del FMI

La consonancia de Gopinath y Georgieva en la institución ha sido muy importante ya que facilitar el acceso a las vacunas de las economías más rezagadas fue uno de los objetivos del controvertido mandato de Georgieva. 

Otro es establecer la prioridad de combatir el cambio climático, algo a lo que Gopinath también ha contribuido gracias a la creación de un grupo de trabajo específico para estudiar y analizar, entre otros fines, políticas para mitigar el calentamiento global. 

Por ese motivo en Washington se considera la llegada de Gopinath como un triunfo de Georgieva sobre la llamada ala dura del FMI. La incógnita es si tendrá que ver esto con el caso argentino o si solo se trata de una mera coincidencia.



iprofesional