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Muy magro -por no decir nulo- ha sido hasta ahora el resultado de las últimas medidas oficiales tendientes a atraer más dólares al mercado local. A pedido del sector, se analizaría ampliar el beneficio a la próxima cosecha. Sin embargo, la diferencia entre la cotización que reciben y la que nomina sus costo se vuelve el principal desincentivo de los productores.
Hasta ahora el resultado ha sido muy pobre. La liquidación de divisas por parte del agor está muy lejos de lo que esperaba el Gobierno, que aplicó una reducción transitoria de retenciones para estimular el ingreso de dólar en momentos en los que flaquean las reservas del Banco Central.
Tal como informó Urgente24, en el primer día de vigencia de las medidas, los agroexportadores ingresaron US$ 54 millones, apenas US$20 millones por encima de lo registrado en la jornada previa y US$32 millones por debajo del viernes.
El miércoles el ingreso de divisas ascendió a US$64,540 millones. Una mejora que aún está lejos de las aspiraciones oficiales, calculadas en más de US$100 millones.
Y si bien en el Palacio de Hacienda no se precipitan y piden una semana más para evaluar el resultado de las medidas anunciadas días atrás, trascendió que el ministro de Economía, Martín Guzmán, analiza una modificación para agilizar el ritmo de liquidación: incluir dentro de los beneficios a la próxima cosecha.
En rigor, se trata de una demanda del propio sector que sostiene que hay productores que necesitan vender su próxima cosecha, para financiar la siembra ahora. Esa es una limitación que ofrecen los decretos que establecieron las bajas de retenciones.
Por estas horas habría conversaciones entre el sector y el Gobierno para extender el beneficio a la próxima cosecha, lo que podría ampliar a 3 o 4 meses el plazo para liquidar divisas. Hasta ahora, solo era 1 mes de anticipación.
El Gobierno estableció que para las exportaciones de granos de soja, las retenciones bajarán del 33% actual al 30% en octubre. En noviembre la alícuota será del 31,5% y en diciembre del 32%. Para aceites, la reducción pasa este mes del 33% al 27%. En el biodiesel, en tanto, se redujo la alícuota del 30% al 26% en octubre, para culminar en un 29 por ciento en enero de 2021.
Más allá de estos estímulos, el principal desincentivo que se les presenta a los productores a la hora de vender es el precio es la brecha entre el dólar que reciben -en pesos- y el que fija sus costos.
“Hoy cotiza con el dólar a $80, el oficial, y a eso le ponen las retenciones y queda en $50. Con esta baja en retenciones te pagan $52, $53. El dólar que ellos están vendiendo hoy con los 2 porcentajes de impuestos es a $140 casi, y ese valor hace que los insumos hayan aumentado, ya que los insumos se tienen que seguir vendiendo al dólar de $80 y las empresas, para cubrir esa brecha cambiara, lo que hacen es aumentar el dólar”, sostuvo Alejandro Repetto, presidente de la Sociedad Rural y representante de Carbap de la localidad bonaerense de Saladillo.
“Nadie va a salir a vender su soja por esta baja, si hubieran querido dar un gesto lo hubieran hecho en marzo o abril cuando se produjo la cosecha, y así los productores chicos –que son los que normalmente venden ni bien cosechan porque no tienen espalda para retener- se hubieran visto de alguna manera beneficiado con estos puntos de retenciones. Una señal hubiera sido dejar las retenciones en 0, si total venderíamos a un dólar a $80 y ellos lo venderían a $135, es impresionante la brecha y eso sí hubiese sido una ayuda para el productor”, sostuvo el dirigente rural en declaraciones a ABC Saladillo.
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