La primera mitad de 2020 ha terminado.
Cuando comenzó el año, la economía y los mercados financieros parecían preparados para construir un 2019 fuerte .
Pero cuando la pandemia de coronavirus se apoderó en marzo, se descartaron todas las suposiciones sobre el futuro. Los analistas, economistas, políticos y el público continúan lidiando con esta nueva realidad.
Y el martes, dos de los miembros más influyentes de la Reserva Federal reiteraron lo que a nuestro juicio es el mensaje más importante que cualquiera que quiera que continúe esta recuperación debe tener en cuenta durante el resto de 2020 y más allá: la recuperación solo será tan buena como esfuerzos para detener la propagación del virus.
"A medida que se reabre la economía, los datos entrantes comienzan a reflejar una reanudación de la actividad económica: muchas empresas están abriendo sus puertas, la contratación está aumentando y el gasto está aumentando", dijo el presidente de la Fed, Jerome Powell , el martes ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara.
“El empleo subió y el gasto del consumidor se recuperó fuertemente en mayo. Hemos entrado en una nueva fase importante y lo hemos hecho antes de lo esperado. Si bien este repunte en la actividad económica es bienvenido, también presenta nuevos desafíos, en particular, la necesidad de mantener el virus bajo control ”.
Hablando en un evento del Instituto de Finanzas Internacionales el martes, el presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, compartió una opinión similar , aunque quizás un poco más negativa, sobre el estado de la recuperación económica en los EE. UU.
"Cuando los estados comenzaron a reabrir, los signos de los datos macro estándar y los datos granulares de alta frecuencia han sido alentadores", dijo Williams. "Juntos, indican que probablemente hemos visto el punto bajo de la recesión y que la economía en general ha comenzado a recuperarse".
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Y, de hecho, la última lectura de The Conference Board sobre la confianza del consumidor publicada el martes mostró que la mayoría de los estadounidenses piensan que la economía mejoró un poco en junio. Los datos del mercado inmobiliario también han impresionado en las últimas semanas . El número de pasajeros que se mueven a través de los puntos de control de la TSA también continúa su aumento constante, mientras que el gasto de los consumidores ha aumentado de manera constante, aunque disminuyó en los últimos días, según datos de JPMorgan .
"Incluso en Nueva York, el estado más afectado, hemos visto signos iniciales de un cambio", dijo Williams el martes. "Las encuestas de empresas manufactureras y de servicios se recuperaron significativamente en junio, luego de mínimos históricos en abril y mayo, y los ingresos de las pequeñas empresas en Nueva York también se han recuperado gradualmente".
Pero como hemos señalado durante la última semana , donde aumenta el número de casos, la economía se estanca.
"En contraste con estos signos positivos, estamos viendo algunos indicios de una desaceleración en el ritmo de recuperación en los estados que actualmente están experimentando brotes a gran escala", dijo Williams.
“Este es un recordatorio valioso de que el destino de la economía está inextricablemente vinculado a la ruta del virus. Una fuerte recuperación económica depende de la contención efectiva y sostenida de COVID-19 ". (El énfasis es nuestro).
Y es esta idea la que debe servir como principio rector para los inversores, los encargados de formular políticas y el público al comenzar la segunda mitad de lo que ha sido un año extraño, desafiante y trascendental.
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