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Las ventas de coches nuevos en Rusia sufrieron una caída histórica del 72,4% interanual en abril, el mes en que el país estuvo confinado para frenar la propagación del coronavirus, indicaron este martes los fabricantes.
En abril solo se vendieron 38.922 coches nuevos en Rusia, según la Association of European Businesses (AEB) que reúne a las compañías del sector, "la caída más fuerte de ventas mensuales en la historia de las estadísticas de la AEB".
Las ventas de coches llevan varios meses a la baja, exceptuando un repunte en marzo por efecto de la caída del rublo que llevó a anticipar compras por miedo a la inflación.
En abril, "las actividades de los concesionarios tuvieron que ser interrumpidas o limitadas en extremo en el marco del confinamiento relacionado con el COVID-19" dijo en un comunicado el director del comité de fabricantes de automóviles del AEB, Thomas Staertzel.
En marzo el pánico bursátil y petrolero provocado por el coronavirus hizo caer el rublo e hizo temer a los rusos un aumento de la inflación.
Por eso muchos decidieron anticipar algunas compras, sobre todo de productos importados, en previsión del aumento de precios.
El conjunto de la economía rusa podría caer en números rojos. El país, muy dependiente de sus exportaciones de petróleo, también se ha visto muy afectado por la crisis sin precedente de este sector.
afp
