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Según los informes, el principal regulador financiero de Japón está buscando actualizar su marco regulatorio para el sector de criptomonedas para frenar las inversiones especulativas.
En abril de 2017, la Agencia de Servicios Financieros (FSA) - el regulador financiero de Japón - implementó una nueva legislación que revisó la Ley de Servicios de Pago para reconocer la criptomoneda como moneda de curso legal. El movimiento regulatorio fue pionero en el momento en que una economía importante ordenaba a los operadores locales de criptomonedas registrarse y obtener una licencia de la autoridad para operar un intercambio criptográfico en Japón.
El regulador ordenó el marco para prepararse de manera proactiva para un aumento en la adopción de criptomonedas, específicamente en su uso en pagos y remesas. La FSA se movió para "evitar una situación en la que no hay leyes que rijan (criptomonedas) cuando se utilizan ampliamente", dijo un alto funcionario de la autoridad reguladora al Japan Times .
Sin embargo, el regulador no previó que los adoptantes recurrieran a las criptomonedas como el bitcoin como inversión en lugar de instrumentos de pago y, como resultado, ahora busca ajustar esas regulaciones para controlar las inversiones especulativas, reveló el informe el miércoles.
La FSA estableció un panel de expertos en abril para "cerrar las brechas entre las reglamentaciones y la práctica real de las criptomonedas", agrega el informe, dando más pistas sobre el cambio regulatorio del marco actual.
Según informó CCN en julio, la FSA está buscando específicamente incluir el sector de intercambio de criptomonedas dentro del ámbito de la Ley de Intercambio de Instrumentos Financieros (FIEA), aplicando las leyes aplicables a las casas de bolsa tradicionales y las firmas de valores financieros. Según el mandato de la FIEA, las empresas reguladas están obligadas a administrar los fondos de los clientes por separado de los activos de la empresa, lo que, de hecho, vería normas de protección del inversor mucho más sólidas.
Mientras tanto, los intercambios de criptomonedas nacionales están proponiendo normas de autorregulación propias. La Asociación de Intercambio de Divisas Virtual de Japón (JVCEA), un organismo que representa los dieciséis intercambios de criptogramas autorizados, propone un límite de 4 a 1 en el comercio de margen para restringir a los inversores a pedir prestado solo hasta cuatro veces su depósito original. La medida, vista como un medio para limitar el riesgo de pérdidas para los inversores, se propone en un mercado que actualmente no ve restricciones en las operaciones de margen prestado. Un puñado de bolsas nacionales ofrecen un límite de apalancamiento de 25 a 1, el límite máximo de margen predeterminado para el comercio de divisas.
Tal comercio actualmente no se controla, dijo un funcionario de la FSA al Japan Times. Si se produce la revisión propuesta, las criptomonedas también se clasificarían como 'productos financieros', lo que prepararía su entrada en los principales mercados financieros.
ccn
