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Carlos Melconian criticó hoy el “excesivo gradualismo” del Gobierno en materia de política fiscal y apeló a un ejemplo de color para graficar la necesidad de “mayor shock” en las medidas para bajar el déficit, un reclamo de vieja data del economista.
“El anuncio del 28 de diciembre (sobre el cambio en las metas de inflacion), más allá de que pareció improvisado, fue correcto en el sentido de que se blanqueó una situación anormal que no la creía nadie”, sostuvo en diálogo con La Red.
Pero planteó su postura crítica: “Yo creo que la situación debe verse en estos términos: la política fiscal son cuatro platos de ravioles, y la política monetaria es el intento de usar una camisa slim fit, que es contradictoria con los cuatro platos. El anuncio de diciembre no fue ‘bajá los ravioles’ sino ‘comprate dos talles más de camisa’”.
"La política fiscal son cuatro platos de ravioles, y la política monetaria es el intento de usar una camisa slim fit, que es contradictoria con los cuatro platos. El anuncio de diciembre no fue ‘bajá los ravioles’ sino ‘comprate dos talles más de camisa’”
Sobre el gradualismo
“El gradualismo no fue siquiera gradualismo”, advirtió el economista al evaluar los primeros dos años de gestión del gobierno de Cambiemos, y reiteró su preocupación por “el nivel de endeudamiento” que genera el retraso de la adopción de algunas medidas que -en su opinión- son muy necesarias.
“El propio Presidente lo dijo, el endeudamiento no es sostenible en el tiempo. No es sostenible ni voluntariamente ni porque te lo permitan”, manifestó.
Y continuó: “La modificación del costo de tomar deuda en el mundo que se produjo el otro día significa un cachetazo para Argentina. El resto de nuestros vecinos ni se movió y a nosotros nos subió medio punto la taza. Eso supone que el país va a pagar 600 o 700 millones de dólares más de deuda”.
La lucha contra la inflación
El economista evaluó por otra parte que, en la lucha contra la inflación, el Gobierno está todavía en “la herencia que le dejaron” y que aún “no ha podido quebrar el 20% anual”.
“La tasa de inflación de Argentina, desde 2007, ha tenido siempre el 20% como piso”, señaló. “Salvo dos excepciones, el 2014 -por obligación- y en 2016 -por decisión-, donde se llegó al 40%. Hoy hemos vuelto a eso y no hemos podido resolverlo.”
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