El grupo de distribución Carrefour anunció hoy la adquisición por 2.000 millones de euros a Klépierre de 127 centros comerciales en Europa que, unidos a otros 47 que ya tenía en propiedad en Francia, van a constituir una nueva filial.

Todos juntos suponen más de 800.000 metros cuadrados de superficie comercial y un valor patrimonial de 2.700 millones de euros.
La intención del gigante francés de la distribución con la creación de una sociedad específica para agruparlos es llevar a cabo "un plan de renovaciones y de extensiones creador de valor", teniendo en cuenta que será "un gran actor de los centros comerciales en Europa".
Para financiar la operación, Carrefour recurre a 1.800 millones de euros de fondos propios -un 42 % controlados directamente por la compañía y el resto por inversores institucionales- y por la emisión de deuda por 900 millones de euros.
Los resultados de esta filial se integrarán en las cuentas de Carrefour, que precisó que la transacción está supeditada a un acuerdo final entre las partes y a la recepción del visto bueno por las autoridades reglamentarias.
Se someterá a consulta a las instancias de representación del personal y debería formalizarse durante el primer semestre del año próximo. EFE