El Poder Ejecutivo promulgó hoy la ley de reforma al mercado de capitales, que busca promover una mayor participación de inversores minoristas, facilitar el financiamiento de las PyMEs y otorga amplias atribuciones de control a la Comisión Nacional de Valores (CNV).
El acto administrativo quedó refrendado mediante el decreto 2601 que con las firmas de la presidenta Cristina Fernández; el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se publicó en la última edición del Boletín Oficial.
El Gobierno presentó el proyecto a fines de octubre y quedó convertido en ley el 29 de noviembre con la aprobación de la Cámara de Senadores.
La ley estableció que la Comisión Nacional de Valores (CNV) será el único organismo de control de la oferta pública de acciones y títulos.
A partir de ahora, el organismo que conduce Alejandro Vanoli unifica las funciones de autorización, negociación, supervisión y policía de los valores negociables, funciones que hasta ahora tenían tres entidades distintas.
Además, la CNV podrá "solicitar informes y documentos, realizar investigaciones e inspecciones en las personas físicas y/o jurídicas sometidas a su fiscalización, citar a declarar, tomar declaración informativa y testimonial".
"Cuando, como resultado de los relevamientos efectuados, resulten vulnerados los intereses de los accionistas minoritarios y/o tenedores de títulos valores sujetos a oferta pública, la Comisión Nacional de Valores, según la gravedad del perjuicio que determine, podrá designar veedores con facultad de veto de las resoluciones adoptadas por los Órganos de Administración de la entidad en cuestión, cuyas disposiciones serán recurribles en única instancia ante el Presidente de la Comisión", dispone el artículo 20 de la ley 26.831, que modificó la ley 17.811.
Por otro lado, la norma contempla que universidades y otras entidades puedan registrarse como calificadoras de riesgo de acciones y valores, algo que hasta ahora sólo hacen las agencias de calificación.
También elimina la obligatoriedad de reunir la calidad de accionista o socio de la Bolsa para que un agente intermediario pueda operar en un mercado determinado.