Después del paro general del martes, convocado por las centrales sindicales opositoras, la Casa Rosada recibió el reclamo de la CGT que dirige Antonio Caló de elevar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias en el primer trimestre de 2013.
Los sindicalistas afines al Gobierno reclaman además, que se universalicen las asignaciones familiares. Esos pedidos coinciden con los que llevaron a Hugo Moyano y Pablo Micheli, titular de la CTA, a convocar al paro nacional que se realizó el último martes.
En ese sentido, Roberto Fernández, titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), aseguró que "no quedé conforme con lo del aguinaldo. El Impuesto a las Ganancias debería resolverse antes de marzo: es un límite".
El sindicalista se refirió así a la decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de exceptuar por única vez del pago de Ganancias al próximo medio aguinaldo.
En el mismo sentido se habrían manifestado Omar Viviani, titular del Sindicato de Peones de Taxis y Horacio Ghilini, del Sindicato de Docentes Privados (SADOP), quién además elaboró un proyecto de reforma tributaria que será entregado en mano a funcionarios del Gobierno.
Fernández fue cuestionado por las bases de su propio sindicato por no adherirse al paro general convocado por Moyano y Micheli.
En cambio Andrés Rodríguez, secretario general de UPCN, celebró la medida dispuesta por la Presidenta y minimizó los reclamos de los gremios cercanos al Gobierno: "No hay una cuestión de plazos porque la ley establece que el mínimo no imponible debe regir a partir del 1° de enero. Es retroactivo. No altera lograrlo antes, pero aspiramos a que no sea una negociación eterna y calmar las expectativas", según consignó el diario La Nación.
La semana pasada, la jefa del Estado le garantizó a la CGT oficialista que se creará una mesa de diálogo para debatir temas salariales en 2013.
En ese encuentro, los sindicalistas buscarán definir la suba del mínimo de Ganancias, pedirán que se universalicen las asignaciones familiares y que se llame a debate sobre los índices reales de inflación.
La CGT oficialista se reunirá hoy para evaluar los efectos del paro general del martes y analizar los pasos a seguir en su relación con el Gobierno. Los representantes sindicales buscarían obtener antes de fin de año un nuevo giro de fondos para sus obras sociales, que la Casa Rosada tenía frenados.
Mientras tanto, Rodríguez consideró que "el paro de Moyano fue parcial y con un sentido netamente político". En cambio Caló evitó la confrontación con el líder camionero y aseguró que "nosotros apostamos al diálogo. En 45 días, esta CGT consiguió muchas cosas".
Durante el encuentro de hoy, la CGT oficialista avanzará también en la organización del comité confederal que se realizará el 12 de diciembre. Ese día se presentaría la Juventud Sindical, integrada hasta ahora por 35 organizaciones, y se autorizaría el ingreso de nuevos gremios a la central. En ese sentido, podrían sumarse la Federación Argentina de Trabajadores de las Universidades Nacionales (Fatun), que se alejó de Moyano luego del llamado al paro de anteayer.