Argentina apoyaría a Lagarde para conducir el FMI

El Gobierno tendría decidido apoyar a la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, como candidata a suceder a Dominique Strauss Kahn en el cargo de director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).

La posición oficial terminará de definirse esta semana, después del encuentro que mantendrán Amado Boudou, ministro de Economía y su par brasileño, Guido Mantega, quien llegará al país para participar de la cumbre de la Unasur.

Lagarde también sería la candidata preferida por Brasil, según medios de ese país.

Un funcionario nacional dijo al diario El Cronista Comercial que Lagarde "parece ser la más indicada para continuar con las reformas del FMI".

Otras fuentes oficiales aseguraron al matutino que la visita de Agustín Carstens, candidato mexicano a la conducción del Fondo, no alcanzó para revertir el apoyo que la Casa Rosada le daría a Lagarde.

Carstens estuvo el viernes en Buenos Aires y se reunió con Boudou y con Mercedes Marcó del Pont, presidenta del Banco Central (BCRA). Si bien los informantes oficiales dijeron que se mostró más moderado que lo habitual, consideraron que se debió a que "está en campaña".

Como presidente del Banco Central de México, tiempo atrás Carstens se manifestó contrario al pago de deuda con reservas y al control de capitales, y a favor de las metas de inflación, tres aspectos contrarios a la política económica del Gobierno.

En cambio Lagarde prometió darles mayor protagonismo a los países emergentes en caso de alcanzar la conducción del FMI, aunque en su campaña pasó por Brasil y no llegó a Argentina. El apoyo a la ministra de Economía francesa sería también un gesto diplomático justo cuando las negociaciones con el Club de París para acordar el repago de unos 8.500 millones de dólares se encuentran estancadas.

El próximo viernes se oficializarían las candidaturas de ambos postulantes y 20 días después los miembros del Fondo decidirán quién será el próximo presidente del organismo. Si Argentina y Brasil finalmente apoyan a la francesa, respaldarían el histórico reparto del Banco Mundial para los estadounidenses y el FMI para los europeos, que se acordó en Bretton Woods tras el fin de la Segunda Guerra Mundial.

(Nosis)