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Había leído mucho acerca de Naohiko Saito, pero nunca se me ocurrió que tendría la posibilidad de conocerlo en persona. En este punto es necesario hacer una aclaración. No fui al evento de ayer en Zárate como periodista, sino como propietario del GR Yaris #245 que llegó a la Argentina (leer crítica). Por ese motivo, en esta nota es posible que se me escapen algunos párrafos de fan-boy.
Saito estuvo a cargo del proyecto del GR Yaris desde el primer día. La idea de Toyota fue fabricar un deportivo de calle, que le permitiera homologar un auto para correr en el Mundial de Rally. El plan era fabricar 25 mil unidades para lograr esa habilitación, pero el auto fue un éxito mundial y ya supera los 30 mil ejemplares producidos. Entre 2021 y 2022, en la Argentina se vendieron 300 GR Yaris. Parece poco, pero nuestro país fue uno de los que más unidades consiguió: España también recibió 300 y Francia apenas 200, mientras que Estados Unidos, Brasil y Chile no consiguieron ninguno.
El propio Daniel Herrero, ex presidente de Toyota Argentina y coordinador de de Toyota Gazoo Racing Latinoamérica contó la anécdota del día en que se repartieron los cupos en Japón, en esta nota.
El evento en Zárate
Pero volvamos al evento de ayer en Zárate. La invitación decía la verdad: Naohiko Saito quería conocer e intercambiar opiniones con los propietarios argentinos del GR Yaris. El encuentro fue en el Centro de Visitantes que se encuentra junto a la fábrica de las Hilux y SW4, y contó con la presencia de las máximas autoridades de la marca en el país, incluyendo a Gustavo Salinas, presidente de Toyota Argentina, el mencionado Herrero y el gerente general de Toyota Gazoo Racing Argentina, Juan Pablo Grano. También estuvieron todos los ingenieros de GR Argentina, muchos de los cuales ayer conocieron por primera vez en persona a "El Jefe" Saito.
Naohiko Saito es toda una leyenda en Toyota, porque supo transferir a un auto de calle todas las características que el presidente de la compañía, Akio "Morizo" Toyoda, había exigido para triunfar en el Mundial de Rally. La apuesta fue un éxito: la marca ganó los últimos mundiales de rally y todo indica que mantendrá su corona en 2023.
Pero Saito no llegó a la Argentina para hablar de campeonatos ni carreras. El ingeniero quería conversar en persona con los propietarios del auto de calle. Le habían llegado comentarios acerca de la pasión de los dueños argentinos y de algunas transformaciones muy extremas, que habían hecho sobre sus autos. Ayer asistieron alrededor de 30 GR Yaris al encuentro en Zárate y yo concurrí junto a mi socio en este proyecto, mi hijo Vito (leer historia). Nos asignaron un lugar en el estacionamiento junto a dos dueños que modificaron por completo sus autos, pero con planteos muy diferentes: Santiago lo transformó en un auto extremo para track days sobre asfalto, mientras que Martín lo convirtió en un máquina para rallys de tierra. A mi auto no lo cambié demasiado: sólo le agregué la cámara de retroceso y le puse un ploteado simpático. Me sentí un poco intimidado al estacionar junto a esos dos Masters of Tuning.
La recorrida de Saito San
El ingeniero Naohiko Saito comenzó a pasar auto por auto. Saludaba al propietario, le preguntaba su opinión sobre el GR Yaris y, cuando se trataba de unidades con modificaciones, no dudaba un segundo: se tiraba al piso y comenzaba a observar todos los cambios que le habían hecho a "su criatura". Un asistente que caminaba detrás suyo anotaba todo en un pequeño cuaderno. Saito pedía ver los motores modificados, preguntaba sobre cambios en la suspensión, quería saber todo sobre frenos, llantas y escapes. Santiago sueña con bajar tiempos de vuelta en pista. Martín le preguntó cómo podría instalar una jaula de seguridad en el habitáculo.
Yo no podía hablar sólo de la cámara de retroceso y del ploteado, así que cuando llegó mi turno decidí poner en práctica lo único que sé hacer en esta vida: preguntas.
Una mini entrevista a Naohiko Saito
-Ingeniero Saito, ¿le puedo hacer una pregunta?
-Sí, por supuesto.
-Cuando recibió el encargo de desarrollar el GR Yaris, ¿en qué autos se inspiró?
-No fue fácil, porque cuando comencé a trabajar en este proyecto, en 2016, no había una referencia cercana de autos de rally de Toyota. Los últimos autos con los que habíamos competido de manera oficial habían sido los Celica y Corolla, en los años '80 y '90. Así que tomamos como referencia autos más modernos, como los Subaru Impreza STi, Mitsubishi Lancer Evolution y un auto alemán del que se fabricaron pocas unidades: el Audi A1 Quattro.
-Imagino que usted tendrá su propio GR Yaris...
-Oh, sí. ¡Tengo dos!
-¿Dos?
-Sí, y los dos los tengo con preparaciones muy diferentes. Uno lo convertí en un auto de pista y el otro lo transformé en un auto de rally. Creo que es un auto que se puede adaptar muy bien a los dos tipos de terrenos.
-¿Le puedo hacer una última pregunta?
-Claro.
-Si tuviera la posibilidad de desarrollar una evolución o una nueva generación del GR Yaris, ¿qué cambios le haría o qué modificaciones aplicaría con respecto al modelo actual?
-Ah, esa es una pregunta muy interesante. Bueno, puedo decir que nunca dejamos de desarrollar el GR Yaris. Es un auto que se encuentra en constante evolución porque, más allá de las unidades de calle, recordemos que nació para ser un auto de competición. Así que estamos todo el tiempo analizando mejoras en la suspensión, en los frenos y en el motor. Por eso quisimos conocer a los propietarios argentinos del GR Yaris, para escucharlos en persona y saber qué piensan del auto.
La recorrida
Me hubiera quedado horas charlando con el ingeniero Saito, pero había otros propietarios que querían conocerlo también. En todos los casos siguió el mismo procedimiento: se presentó con el dueño, le preguntó qué opinaba del auto, averiguó por los cambios que le había hecho y se tiraba una vez más al suelo, para ver en detalle esas modificaciones.
Al final del recorrido, Saito brindó un breve discurso para todos los presentes. Fue un momento muy emotivo porque, más allá de las palabras de agradecimiento y su mensaje de atención al cliente, Saito se empeñó en transmitir su mensaje en castellano. Tenía el discurso escrito en su celular y realizó un gran esfuerzo para expresarlo en nuestro idioma. Ese gesto de respeto del Ingeniero del GR Yaris emocionó más que el discurso en sí mismo. Puede verse completo en el video de acá abajo.
El momento de los autógrafos
Al término del evento, todos los que estuvieran interesados pudieron llevarse de recuerdo la firma del ingeniero Naohiko Saito en sus autos. Algunos pidieron que estampara el autógrafo en el techo, en el capot, en el faldón lateral, los parasoles y otros rincones del auto. Saito no dudó, una vez más, en tirarse al piso para cumplir el deseo de sus fans.
Fue en ese momento que comencé a preguntarme: "¿Qué llevó a este hombre a viajar desde Japón, para charlar con un grupo de argentinos y pasar una tarde de domingo tirado en el piso de una fábrica de autos en Zárate?".
La filosofía de Toyota de escuchar a los clientes es legendaria, pero esto superaba todo lo que había podido imaginar. Saito estaba muy interesado en saber qué clase de uso le damos los usuarios a los GR Yaris y qué opinamos del auto. Cuando se lo pregunté respondió de manera muy diplomática, pero estoy convencido de que esta visita incluyó un objetivo que va un poco más allá de agasajar a un grupo de clientes. Estoy seguro de que Saito debe estar trabajando en una próxima evolución de los deportivos de calle de Gazoo Racing. No tengo pruebas, pero tampoco dudas.
Volvimos a casa con la firma de Saito estampada en el motor y en el parasol del conductor. Habíamos conocido a una leyenda de la ingeniería automotriz japonesa: el padre del auto que tenemos desde hace dos años en nuestro garage. En ese momento, desde el asiento del acompañante, mi socio me recordó: "Acordate que, si algún día querés venderlo, el único que te lo puede comprar soy yo".
Como dice mi vecina Majo: "No tengan hijos. Es una trampa".Galería: Naohiko Saito - Toyota GR Yaris - Argentina
