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Una familia y miembros del Centro de Técnicos de la Ingeniera y Arquitectura de La Matanza, reclaman por el uso de su institución, que desde hacer algunos meses se encuentra en manos de la CTA Autónoma.
Creado en 1947, el Centro de Técnicos de la Ingeniera y Arquitectura de La Matanza nucleó a todos los profesionales de esta área, generando un espacio de trabajo mutuo y constituyéndose casi en una familia integrada por cada uno de sus miembros. Con el paso del tiempo, muchos de ellos fueron falleciendo y en el año 2012 se presentó el último balance. Desde entonces y hasta el 2022, la institución fue liderada por Marcelo San Martín, quien había sido expulsado en 2010 por espurios manejos dentro de la misma.
Sin embargo, y luego de una larga investigación, ex miembros descubrieron que dentro del lugar continuaban realizándose actividades aunque no se presentara la documentación para conservar la personería jurídica. Rápidamente constituyeron una comisión normalizadora con el fin de no perder la sede y recuperar lo que para ellos constituye una institución con un importante valor sentimental, además de ser sumamente importante para la comunidad.
En este sentido, la comisión normalizadora había sido convocada por el Concejo Deliberante, donde destacarían la figura Arturo Morelli, fundador del centro, aunque de un día para el otro el proyecto fue eliminado de un plumazo por cuestiones políticas, ya que, según consignan algunas fuentes, uno de sus familiares estaría vinculado al Pro en la Ciudad de Buenos Aires.
Consultada por REALPOLITIK, este familiar sostuvo que por su labor personal en beneficio de una fundación sin fines de lucro, están en permanente diálogo con diversos actores políticos de todos los espacios, no únicamente con el Pro. Pero aún así, el reconocimiento a su bisabuelo fue cajoneado.
Luego de presentar la comisión normalizadora ante la dirección de Personería Jurídica, se logró mantenerla, evitando que cayera en desgracia en diciembre de 2022. Sin embargo, en enero de 2023 fueron convocados por los supuestos miembros de una comisión ya existente. Al llegar al lugar se encontraron con alrededor de un centenar de personas pertenecientes a la CTA y la CGT.
Uno de los allegados a uno de los miembros de la comisión normalizadora le sugirió retirarse “porque el problema es con vos, te están buscando”, en un tono que dejó entrever no solo el malestar sino ciertos manejos intimidatorios por reclamar lo que pertenece a los técnicos y arquitectos matanceros.
Al frente de esa comisión se encontraba Mariano Borras, referente de la CTA Autónoma, quien se autoproclamó presidente del lugar, desconociendo las presentaciones realizadas por la comisión normalizadora en 2022 y sobre la que la Justicia aún no se ha expedido.
Borras acusó a la comisión respaldada por la dirección de Personaría Jurídica de querer usurpar el lugar, “cuando la realidad muestra que son ellos quienes estando flojos de papeles lo utilizan con fines políticos”, según relataron a REALPOLITIK. Mientras tanto y a la espera de una resolución judicial, son varios los que especulan con el valor del terreno, los locales y el salón de fiestas que pertenecen a la organización.
Vale destacar que, oportunamente el lugar fue adquirido por alrededor de 50 mil dólares y hoy posee un valor estimado de más de 2 millones en moneda norteamericana. Esto genera un interés natural en más de uno de los implicados, desconociendo la legitimidad de una institución que no le pertenece a la CTA sino a los técnicos y arquitectos que durante años la pusieron en pie.
(www.REALPOLITIK.com.ar)
