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En su doble rol como candidato y ministro de Economía, hay un elemento económico clave para su desempeño electoral. ¿Cuál es y por qué?
Sergio Massa, ministro de Economía y candidato a presidente por Unión por la Patria, parece haber aprendido de sus pronósticos anteriores sobre la inflación y ahora evita arriesgar cifras específicas. En cambio, su estrategia parece centrarse en la estabilización de los precios y usarlo a su favor.
Este jueves se conocerá el dato de inflación correspondiente al mes de junio. Desde el oficialismo esperan una desaceleración que marque el camino de aquí en adelante. No obstante, para Massa es un dato más que importante para su carrera a la presidencia.
Massa espera que la inflación disminuya en el mes previo a las elecciones primarias (PASO), algo que coincide con los pronósticos de las consultoras privadas que proyectan una desaceleración del IPC para los próximos meses, aunque no muy significativa.
Entonces, el objetivo es la "estabilización" durante la campaña. En ese sentido, se lanzaron algunas medidas para promover el consumo y abordar la inflación, como aumentar el tope del crédito bancario y reducir la tasa de interés del programa "Ahora 12". También se hay acuerdos con empresas alimenticias, fabricantes de electrodomésticos y de indumentaria, todo ello para contener los aumentos de precios hasta después de las PASO.
Sin embargo, los desafíos podrían surgir después de las elecciones primarias, ya que los factores estacionales podrían ponerse en contra de la estabilidad. El objetivo de Massa es obtener un resultado positivo en las PASO que le permita mantener la estabilidad más adelante.
Tanto el Gobierno como las consultoras privadas proyectan una desaceleración en los precios de junio, con un enfoque particular en el rubro de Alimentos y Bebidas, el cual se espera que continúe aumentando a un ritmo más moderado. Esta tendencia se debe en parte a la aprobación de un aumento del 5% para los productos en supermercados a partir del 15 de agosto.
Sergio Massa: la apuesta de cara a las PASO
El Gobierno está apostando por aliviar los precios de los alimentos en beneficio de los ciudadanos. Según la Secretaría de Comercio, el objetivo se centrará en los controles de precios, especialmente en los productos de consumo masivo hasta mediados de agosto.
No obstante, existen variables estacionales que modificaron su impacto en la estrategia de Massa. Uno de los factores más significativos es el precio de la carne, que experimenta cambios bruscos en su ciclo. Durante el último trimestre de 2022, el aumento en el precio de la carne era tres veces menor que el promedio de los alimentos en general. Sin embargo, en verano, se aceleró su incremento. Debido a la importante ponderación de la carne vacuna en la canasta del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec, cada vez que se producen aumentos en las carnicerías, esto impacta directamente en el IPC. Sin embargo, a partir de mayo se viene registrando un cambio en esta tendencia: el precio del asado apenas tuvo una variación del 1,7%, y el cuadril del 2,1%.
Sin embargo, el Gobierno ya empleó varias de las herramientas a su disposición para evitar un aumento descontrolado de los precios, y con las elecciones primarias en el horizonte, tiene pocas opciones restantes.
Entonces, el objetivo de Massa está directamente en los precios, la tasa de interés y también en evitar un cambio brusco en los tipos de cambio paralelos. Esos son los tres frentes de batalla que el ministro y candidato está atacando desde su gestión y su campaña electoral.
En síntesis-, el Gobierno está implementando medidas para controlar la escalada de precios, especialmente en el sector de alimentos y bebidas. Si bien se espera una desaceleración en los precios, se reconoce que el margen de acción es limitado. Las estrategias de estabilización de precios forman parte de la estrategia política de Sergio Massa y su equipo, quienes apuestan por mostrar resultados favorables en la inflación durante la campaña electoral.
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