Ya se conocen quiénes serán los que competirán por la presidencia de cara a las PASO 2023. Esta vez el conejo que sale de la galera fue el propio Sergio Massa quien a última hora del viernes fue confirmado como candidato único del espacio oficialista. Tendremos como candidato a presidente al actual ministro de Economía quien lleva casi un año en el cargo y con una inflación del 120% interanual. Junto a Massa están, como principales competidores, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta por Juntos por el Cambio y Javier Milei por La Libertad Avanza.
El próximo presidente saldrá entre estos precandidatos. Son 4 candidatos distintos buscando a un mismo electorado objetivo. Más allá de las características particulares de cada uno, todos apuntan al votante del centro. Un sector más liberal y libertario irá con Milei, la derecha que se resiste a dejar JxC encuentra representación en Bullrich, la gran avenida del centro se identifica con Larreta y el peronismo residual junto al kirchnerismo, por obediencia y tragando sapos, irá con Massa.
Esto mejora ampliamente las posibilidades del oficialismo pero no podrá superar la realidad de los datos y los mismos indican que no ha habido en la Argentina un candidato oficialista que gane las elecciones con estos indicadores económicos. Y no hablamos solamente de la inflación del 120%, también del dólar en torno, por ahora, de los $500, de 100% de recargos en los gastos con tarjetas, de la caída de salarios, de un cepo que traba hasta las importaciones vitales, de un salario que debe actualizarse cada 3 meses para no perder tanto poder adquisitivo y de reservas que bajan más de u$s 13.000 millones en el 2023 entre otros.
Los datos son estos y muestran un profundización de la crisis desde la llegada de Massa al ministerio de Economía, sin olvidar que es parte de este gobierno desde antes de asumir. Las versiones sobre que la llegada del líder del Frente Renovador al Palacio de Hacienda evitó una catástrofe mayor son parte del relato y una hipótesis incomprobable.
Cómo afectará esto a las inversiones
En el mercado bursátil con las acciones en máximos y bonos luego de un interesante rebote el consenso del mercado indica que está última noticia debería ser bullish, yo tengo mis reparos a esos análisis dado que si bien el oficialismo no ganaría mejora bastante sus chances y logrará seguramente un mejor resultado en las categorías siguientes (gobernador, diputados, senador e intendentes). A mi parecer, el mercado se encontraba más a gusto con una fórmula que le asegure más la derrota del oficialismo en todas sus categorías.
Para los bonos en pesos ahora más que nunca su riesgo de no pago se minimiza, un ministro de economía en carrera no dejará bajo ningún motivo de pagar los vencimientos que dependen de su propia gestión.
Los dólares financieros y la brecha cambiaria entra en zona de alto riesgo, ha sido una práctica común en la Argentina que parte de los inversores y ahorristas dolaricen parte de su portafolio a la espera de los resultados electorales. Si bien las PASO no resuelven la contienda electoral en las últimas elecciones han resultado más que una interna una primera vuelta a los efectos prácticos y su resultado termina teniendo gran impacto en los mercados, por tal motivo es de esperarse que esa dolarización se acelere en las próximas semanas frente a un gobierno con fuerte escases de dólares.
En lo que va del año las reservas caen más de u$s 13.000 millones a pesar del esfuerzo del Massa por conseguir toda línea de financiación disponible a nivel mundial para lograr un ingreso de dólares.
Segundo semestre movido con el dólar
Por motivos estacionales el segundo semestre suele ser más dólar demandante y generalmente son los dólares que entran en el primer semestre quienes amortiguan ese impacto, este año producto de la fuerte sequía esos dólares no ingresaron pero la demanda se mantendrá junto a la ya mencionada dolarización pre electoral.
La asistencia que algunos espera venga de parte del FMI tiene pocas probabilidades de confirmarse, en primer lugar el país no cumplió con las metas del primer trimestre y es por ello que hoy se está negociando un waiver o nuevas metas que permitan los desembolsos necesarios para cancelar los vencimientos, por otra parte no hemos visto nunca a un FMI adelantar o girar más fondos a un gobierno que está terminando, generalmente espera a que esté definido el nuevo presidente para llegar a un acuerdo que se sostenga en el futuro.
Hoy lo máximo a lo que puede aspirar el gobierno es a que ya sea por un cambio de metas o por un waiver el FMI mantenga el cronograma de desembolsos calzado con los vencimientos pero sin adelantamiento de fondos y mucho menos giro de fondos frescos.
Así la situación cambiaria es el punto de mayor debilidad de acá a las PASO, no porque $500 sea un valor bajo en relación a los ingresos sino por la poca disponibilidad de dólares como así también el exceso de pesos que no deja de crecer.Lo que podemos vislumbrar en los próximos 2 meses es un escenario de alta volatilidad donde será más que necesario mantener un fuerte control sobre las inversiones y estar dispuestos a mover cartera rápidamente según como se vayan dando los acontecimientos.
iprofesional