El mandatario de Argentina, Alberto Fernández, rechazó
tajantemente las negociaciones individuales de Uruguay para ingresar al Acuerdo Transpacífico con
Oceanía y con China, además de prometer conversaciones con Brasil para consolidar un Banco Central
en conjunto.
"Me invitaste a ser sincero, asi que vamos a ser sinceros", inició Fernández tras el discurso de
apertura del presidente uruguayo Luis Lacalle Pou de modernizar el Mercosur y abrirse al mundo.
Fernández ratificó su posición en contra de los acuerdos de Uruguay con el exterior del bloque,
al que definió como "sálvase quién pueda", y le pidió que cumpla las reglas de convivencia y de
negociaciones interna. Sin embargo, reconoció que el Mercosur necesita modificaciones y
flexibilizaciones tras 31 años de funcionamiento, pero que deberán ser tomadas en consenso.
Luego, criticó el acuerdo firmado con la Unión Europea firmado en 2019 y observó que algunos
países rechazan el ingreso de carnes y granos. Así, indicó que las conversaciones con el bloque
europeo deberán retomarse cuando se solucionen las asimetrías tanto internas como externas.
"Los países se relocalizan y producen de manera local, no en China. El mundo se plantea algo
diferente a la libertad de comercio y los bloques deben fortalecerse. Miren cómo se potenciaron la
Unión Europea o África. El mundo necesita alimentos y energía y nosotros tenemos la oportunidad
de ser proveedores. Con Bolivia y con Chile, tenemos 66% de litio del mundo", señaló.
Por otro lado, observó la posibilidad de fundar un Banco Central en conjunto con Brasil y
reconoció que ya existen conversaciones al respecto. "Me importa comerciar más con Brasil que con
países extrazonas", dijo.
Agencia CMA Latam