Si bien existen en la actualidad más de 200 variedades, son dos los modelos de criptomonedas estables que priman: - Las stablecoin respaldadas por FIAT (dinero o activos monetarios de máxima seguridad y liquidez).
- Las stablecoin algorítmicas respaldadas por criptoactivos que en general se corresponden con el activo nativo de la misma blockchain.
Las primeras: Entre las respaldadas por FIAT encontramos a USDT (emitida por Tether), USDC (emitida por la empresa Circle) y BUSD (emitida por la firma Paxos). Las tres concentran más del 90% del valor de mercado del sector. USDT apareció en 2014. Es la stablecoin más antigua y la más utilizada por traders e inversores, aunque probablemente la menos segura del top 3. Ello se debe a que en su último informe de reservas consolidadas se informó que sus más de 74 mil millones de tokens (equivalentes a 74 mil millones de dólares) están respaldados en un 86% por efectivo y equivalentes (fondos money market y bonos del Tesoro de EEUU de corto plazo), mientras que el resto se reparte entre bonos corporativos, préstamos garantizados y otras inversiones en criptomonedas. Circle, en cambio, alega poseer el 99% de sus reservas en cash y similares para respaldar sus más de 52 mil millones de dólares de tokens USDC, mientras que Paxos sostiene que el 100% de su más de 18 mil millones de tokens emitidos están respaldados por cash y equivalentes. Un dato clave: en los casos de USDC y BUSD los balances que respaldan estas afirmaciones se encuentran auditados bajo regulación de EEUU, mientras que con USDT no sucede lo mismo. En cierto punto, USDC y BUSD serían más seguras que la mayoría de los bancos ante corridas de los ahorristas e inversores. Los bancos, al prestar el dinero que guardan de los depósitos de sus clientes, se operan con cierto riesgo de quiebra o default, tal como sucedió en 2001 en Argentina. Las segundas: Entre las stablecoins logarítmicas se encuentran DAI (emitida por MakerDAO, ligada a la blockchain de Ethereum) y la difunta UST. En ambos casos no hay cash ni equivalentes que respalden la emisión, sino que se busca mantener la paridad 1 a 1 con el dólar a través del control de la oferta de tokens, muchas veces en conjunción con tokens no estables como en el caso de UST y LUNA o DAI y ETH (el token de Ethereum). La esencia de este tipo de criptomonedas estables es su descentralización, palabra clave en la filosofía del mundo cripto. No obstante, salvo el caso de DAI, donde los contratos inteligentes con altas coberturas la mantienen al amparo de las crisis de mercado, por ahora no han podido tener éxito en su objetivo de replicar al dólar. El colapso de UST se explica por las vulnerabilidades en su algoritmo de paridad entre UST y LUNA que detectaron y explotaron distintos traders, quienes lograron crear una emisión exagerada de tokens de LUNA que hizo que este token pierda valor rápidamente en el mercado (pasó de valer 100 dólares a milésimas de centavos en cuestión de días), produciendo el desacople de UST con el dólar desde valores de 1 a los 0,08 centavos de dólar que cotiza al momento de escribir esta nota. Los 4 riesgos más importantes para el inversor de stablecoins |