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El diputado libertario Javier Milei quiere ser Presidente. Su discurso contra la casta política encuentra eco de forma transversal en los extremos sociales.
Javier Milei viene de realizar una muy buena elección en la ciudad de Buenos Aires. En su primera experiencia como candidato el año pasado, su fuerza, La Libertad Avanza, consiguió 2 bancas en la Cámara de Diputados y se ubicó como la 3ra más votada en el distrito porteño.
De cara al futuro, el economista libertario no se achica, sino todo lo contrario. Ya confirmó que será candidato a Presidente el próximo año. Para ello, Milei recorre el país con miras a construir un soporte para esa postulación.
Mientras trabaja en ese andamiaje, las encuestas le sonríen.
Días atrás se conoció un sondeo nacional de la consultora Opinaia que lo ubicaba como el candidato con mayor intención de voto. Con el 18%, Milei encabezaba las preferencias dentro de un menú que exhibía guarismos que bien podían reflejar el estado de hartazgo de la sociedad con la clases política del que, sin embargo, el diputado libertario se beneficia.
En las últimas horas, se conoció otro sondeo, de Ricardo Rouvier y Asociados. Milei no lidera, lo hace Horacio Rodríguez Larreta (44%, en la sumatoria de voto seguro y voto potencial), pero el economista lo secunda (37,7%).
El escenario es parecido al del estudio anterior. "Ningún candidato obtiene una afirmación de voto de gran significación y esto tiene que ver con la crisis entre la política y la sociedad", señaló el informe de Rouvier. Sin embargo, destaca la performance de Milei al señalar que "tiene una proyección interesante considerando que carece de una estructura política consolidada".
No obstante, tal vez el dato más interesante de la encuesta de Rouvier es uno referido a la penetración que logra Milei en distintas capas sociales. Puede causar sorpresa en algunos que el diputado logre cautivar en proporciones similares (cercanas al 40%) a los extremos de la pirámide social.
La encuesta destaca su intención de voto en la clase media-baja y baja, del 38,1%, en la media-alta y alta, apenas por debajo, del 37,9%.
La fuerte penetración en las capas más bajas de la pirámide ya genera espanto en sectores más cercanos a la izquierda que observan que esa porción sería la primera víctima de la prédica anti-estado de Milei.
Pero lo que está claro es que si hay algo que hace transversal esta inserción de Milei no son sus propuestas económicas sino su discurso contra el establishment político, que encuentra terreno fértil en una sociedad que empieza a deplorar a, como la llama el diputado libertario, la "casta" que no resuelve sus problemas cotidianos.
El estudio de Ricardo Rouvier y Asociados se realizó entre el 04 y el 15/04 en base a 1.400 casos efectivos+/- 2,6%, el margen de error.
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