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Mercado internacional
Comenzó la semana manteniéndose el sendero bajista que había iniciado días atrás tras testear los máximos históricos. Desde la primera hora, los índices mostraban fuertemente la pérdida de terreno, sin embargo, en las últimas horas de la rueda se pudo apreciar un rebote que sirvió al menos para calmar la desesperación de aquellos que remataban sus activos a cualquier precio, y considerar si esta situación de precios más bajos funcionaría de piso hacia el rebote de las cotizaciones.Si consideramos el revuelo provocado en los mercados a partir de la última reunión de la FED y las diversas interpretaciones en torno a cuándo y cómo se aplicará la suba de tasas y el inicio del tapering, resulta razonable el nivel de precios que muestran las pantallas que no hacen más que alimentar la incertidumbre y la volatilidad.
Es por ello que se espera que mañana o el miércoles los miembros del Comité de Mercado Abierto de la Fed (FOMC) brinden más precisiones y aclaren cuál será el plan de acción para el 2022.
Además, esta semana el mercado estará a la espera de otros datos de gran importancia como lo es el IPC de Estados Unidos de diciembre. Si la tasa de crecimiento interanual supera el 7%, sería el nivel más alto de los últimos 40 años. También se publicará el índice de precios de la producción (IPP), cuya tasa de crecimiento podría ubicarse en un mayor nivel.
Otro punto clave es el comienzo de la temporada de balances trimestrales, protagonizada esta semana por los principales bancos estadounidenses.
En este contexto, mientras se escribe el presente comentario y a pesar de las importantes bajas, lograron achicar posiciones en horas de la tarde y así los índices más relevantes se ubican de la siguiente manera: el Dow Jones desciende 0,83%, seguido por el S&P 500 que también baja 0,60% y el tecnológico Nasdaq con una caída de 0,55 %.
Por su parte, las criptomonedas continuaron inestables y en clave bajista durante todo el fin de semana. El Bitcoin y las más importantes altcoins que lo siguen se encuentran en franco descenso desde el arranque del año. La presión bajista de corto plazo parece no querer mermar, en parte por los máximos conseguidos durante noviembre y también ante la inminente suba de tasas en los EE. UU.
Mercado local
La buena noticia dentro de un clima complicado en el mercado financiero viene de la mano de los Cedears argentinos, ya que tendrá lugar en breve la emisión de este tipo de certificados pero esta vez estarán vinculados a ETF globales, entre ellos, los que representan a los principales índices bursátiles de la bolsa estadounidense.
Si hablamos del mercado doméstico, sigue con rumbo incierto frente a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, y en un ambiente en el que los mercados globales están en ebullición, no hacen más que echar leña al fuego hacia un clima bajista por el que transitan tanto bonos como acciones.
A su vez, el índice Merval suma otra baja, esta vez del 0,77% y se ubica en los 83.746 puntos, mientras que el riesgo país estuvo en torno a los 1809 puntos y representa un aumento de 100 puntos básicos respecto del lunes anterior.
Continúan las bajas en los títulos públicos, los bonos nominados en dólares cayeron hasta 3,7% durante la jornada, ya que no hay definiciones en la negociación con el fondo y todo indicaría que aún falta un arduo camino por recorrer en ese sentido .
Las correcciones en la renta variable fueron generalizadas, pero las que más sintieron el golpe en el panel líder fueron las empresas vinculadas a la energía eléctrica, tales como los descensos de Edenor 2,5%, Pampa Energía 2,4% y Central Puerto 2,2% respectivamente. En el otro extremo, el mejor desempeño lo mantuvo Transportadora Gas del Sur, hoy logró escalar 5,2% y lleva acumulado 7,7% en lo que va del 2022, seguida por YPF con 5,5%.
Fernando Staropoli
Ejecutivo de cuentas
RAVA
