● Las bolsas ignoran las incertidumbres y están centradas en los resultados, que están siendo muy positivos.
Facebook publicaba sus cuentas ayer tras el cierre. Si bien reducía expectativas futuras y los números estaban relativamente en línea, dio a conocer un ambicioso plan de recompra de acciones.
El importe es de 50.000 millones de dólares. Esto sentó muy bien al mercado y provocaba nuevos avances en el valor.
Este es otro de los factores que también se descuentan de manera positiva en el mercado, las recompras de acciones, a partir que finalice el periodo de “blackout”, el 1 de noviembre.
Nvdia, el fabricante de tarjetas gráficas, también presentó muy buenas cifras y se anota subidas muy importantes.
Tras el cierre será el turno de Twitter y de Google (Alphabet).
Toda esta situación le está dando la vuelta al sentimiento inversor respecto a la renta variable, como se observa en el gráfico.
Un sentimiento que se debilitaba
Este sentimiento llevaba meses debilitándose e incluso en septiembre era muy negativo. Pero gracias a los buenos resultados ha tomado impulso.
El miedo a quedarse fuera de las subidas (FOMO) y la llegada de la estacionalidad positiva provocan está rápida subida.
Salvo catástrofe inesperada, es decir, un auténtico cisne negro, todo apunta a un buen ejercicio para la renta variable.
La duda de siempre es: si todo el mundo lo ve de misma manera, las probabilidades de errar el diagnóstico son muy elevadas.
Pero hay que confiar en que no se producirá una decepción antes del cierre del ejercicio.
Josep Codina