La economía de la eurozona aún
enfrenta riesgos debido a la pandemia de covid-19 y la inflación permanece
débil, y así amplio estímulo monetario permanece esencial, según el acta de
la reunión del Consejo del Banco Central Europeo (BCE) realizada los días 20 y
21 de enero.
En general, los miembros acordaron "que no había espacio para complacencia
y que el consejo del BCE debe continuar listo y usar todos sus instrumentos,
conforme sea apropiado, para garantizar una convergencia robusta de la
inflación en dirección a su meta", incluyendo la tasa de depósito. En la
reunión de enero, el BCE mantuvo sus principales tasas de intereses y sus
programas de compra de activos inalterados.
Para los miembros del BCE, datos recientes confirmaron "un impacto a corto
plazo pronunciado de la pandemia sobre la economía y una debilidad prolongada
en la inflación". En el escenario global, hay señales de mejora en las
perspectivas, aunque la crisis de salud pública siga representando serios
riesgos.
En la eurozona, el resurgimiento de casos y nuevas medidas de contención
deben llevar a la caída de la actividad en el cuarto trimestre de 2020, aunque
sea menos pronunciado que los previstos en diciembre. Por otro lado, la
intensificación de la pandemia debe pesar más sobre la actividad en el primer
trimestre de 2021.
"El lanzamiento de la vacunación estaba revelándose lento, y también
había preocupación con el posible impacto de la diseminación de nuevas
mutaciones más virulentas del virus", afirmó el acta. Además, la evolución
económica continua desigual entre los sectores, siendo el sector de los
servicios más afectado, y entre los países de la eurozona.
"Con relación a las políticas presupuestarias, una orientación
presupuestal ambiciosa y coordinada continúa siendo crítica". Los miembros
mostraron preocupación con el progreso "lento y desafiador" en la
implementación del paquete de apoyo financiado por el presupuesto de la Unión
Europea (UE).
Con relación a los precios, "parece haber poco riesgo de deflación",
según el acta. Ya la "tendencia persistente de apreciación del euro se
invirtió desde el inicio de 2021", y la evolución de la tasa de cambio del
euro debe continuar siendo monitoreada.
Agência CMA