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China continuará liderando la recuperación económica mundial en 2021, impulsada por la expansión sostenida de la producción industrial y las exportaciones, dijeron economistas el miércoles.
Los comentarios se produjeron después de que el Banco Mundial actualizara su proyección para el crecimiento económico de China en 2021, que se acelerará al 7,9 por ciento, 1 punto porcentual más que su pronóstico de junio.
La recuperación más rápida de China se basó en la liberación de la demanda reprimida y una reanudación de la producción y las exportaciones más rápida de lo esperado, dijo el banco en sus Perspectivas económicas globales de enero de 2021, publicadas el martes.
Un desempeño económico más sólido en China fue “una excepción” en medio de la desaceleración global, dijo, mientras que las interrupciones debido a la pandemia de COVID-19 en la mayoría de los demás mercados emergentes y países en desarrollo fueron más graves de lo que se había previsto anteriormente.
Se prevé que la economía mundial en su conjunto crezca un 4 por ciento este año, después de una disminución del 4,3 por ciento en 2020, suponiendo que el lanzamiento inicial de la vacuna COVID-19 se generalice durante todo el año. La pandemia ha tenido un impacto importante en términos de muerte y enfermedad y puede deprimir la actividad económica y los ingresos durante un período prolongado, dijo el banco.
A pesar de las incertidumbres en el entorno externo, varios economistas destacados pronostican que el crecimiento del PIB de China en el primer trimestre podría alcanzar el 15 por ciento interanual o incluso más, debido a la base baja. Se contrajo un 6,8 por ciento en el mismo período de 2020.
Liu Qiao, decano de la Escuela de Administración Guanghua de la Universidad de Pekín, predijo que es probable que la tasa de crecimiento del PIB de China sea del 18 por ciento en el primer trimestre, respaldada por políticas fiscales y monetarias específicas lanzadas después del brote de COVID-19.
Sin embargo, las incertidumbres con respecto a la demanda externa pueden agregar riesgos a la baja para la economía de China este año, y aún necesita tiempo para impulsar el consumo interno, dijo Liu.
Además, los fabricantes de China han estado expandiendo la producción y las exportaciones desde mediados de 2020. Y una cadena de suministro mejor conectada en la región de Asia y el Pacífico ha impulsado las exportaciones, según Steve Cochrane, economista jefe de Asia y el Pacífico de Moody’s Analytics.
En 2021, “China continuará con cierto estímulo fiscal, pero se espera que su enfoque cambie de las industrias manufactureras a una cobertura más amplia de la red de seguridad social y apuntalar la demanda interna”, dijo Cochrane.
Ning Jizhe, viceministro de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, dijo que China mantendrá una política fiscal proactiva y una política monetaria prudente para estabilizar la economía a un nivel “razonable” este año.
En octubre, el Fondo Monetario Internacional predijo que China alcanzaría un crecimiento del 8,2 por ciento este año, después de convertirse en la única gran economía en ver un crecimiento positivo en 2020.
Se estima que la producción en China se recuperó el año pasado a un ritmo más rápido de lo esperado, con un apoyo particular del gasto en infraestructura, según el Banco Mundial, que predijo un modesto aumento del 2 por ciento en China para 2020.
Hasta ahora, las estadísticas oficiales han trazado un rumbo constante para la recuperación económica del país, según analistas.
El PIB se expandió un 4,9 por ciento interanual en el tercer trimestre de 2020, frente al crecimiento del 3,2 por ciento en el segundo trimestre.
Sin embargo, la recuperación de la economía mundial será moderada, a menos que los responsables de la formulación de políticas actúen con decisión para controlar la pandemia e implementar reformas que mejoren la inversión, advirtió el Banco Mundial, ya que COVID-19 ha continuado propagándose, con resurgimientos bruscos en muchas regiones.
“Si bien la economía mundial parece haber entrado en una recuperación moderada, los responsables de la formulación de políticas enfrentan desafíos formidables – en salud pública, gestión de la deuda, políticas presupuestarias, banca central y reformas estructurales – mientras intentan garantizar que esta recuperación mundial aún frágil gane impulso y establezca un base para un crecimiento sólido ”, dijo el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass.
“Para superar los impactos de la pandemia y contrarrestar el viento en contra de la inversión, es necesario un gran impulso para mejorar los entornos comerciales y aumentar la flexibilidad del mercado laboral y de productos”, dijo.
China Daily
