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Dos indicadores del nivel de actividad industrial publicados este miércoles dan cuenta del impacto del coronavirus en el sector. Por un lado, el del Centro de Estudios de la UIA (CEU) mostró que en febrero la actividad cayó 0,9% interanual, la menor caída de los últimos meses. Por el otro, el Índice de Producción Industrial (IPI) de FIEL que registró en marzo un retroceso interanual de 6,4%.
En relación al mes de febrero, el IPI mostró una pérdida desestacionalizada del 0,9%, a causa del impacto parcial de las medidas de distanciamiento social aplicadas por el gobierno. "Este resultado marca una profundización de la presente fase industrial recesiva que se prolonga por los últimos 27 meses elevando su ritmo de caída
equivalente anual al 5,8%", sostuvo FIEL.
Respecto del mes de abril, el estudio aseguró que el impacto de la cuarentena resultará mayor dado el completo freno de varias actividades, aunque con un mayor dinamismo de la industria alimenticia.
Respecto de marzo, FIEL señaló que "se observaron caídas interanuales muy marcadas en la producción de minerales no metálicos, la siderurgia y la producción automotriz, aunque -y como se anticipara-, otras actividades como la producción de alimentos mostraron un mejor desempeño relativo, sosteniendo su crecimiento interanual".
En consecuencia, en los primeros tres meses del año, el sector acumuló un retroceso de 0,5% en la comparación con el mismo periodo del año anterior, que se amplía al 1,1% desestacionalizado respecto del trimestre previo.
"La producción industrial en abril mostrará el impacto pleno de la cuarentena dado el freno completo de plantas en diversos sectores, la aplicación de guardias mínimas y la reducción de la actividad a la producción de insumos esenciales y ramas exceptuadas. Nuevamente, el impacto entre actividades será diverso, con un mayor deterioro en la producción de durables y bienes de capital. Aún cuando continúa siendo incierta la profundidad que alcanzará la caída de la producción industrial y el tiempo y la forma que tomará las recuperación, las perspectivas de corto plazo indican una mayor caída de la
actividad en abril y una contracción industrial interanual de dos dígitos en el segundo trimestre", dijeron en FIEL.
En el primer trimestre el sector que más creció fue el de la producción de insumos químicos y plásticos que registró una mejora de 9,2% en relación a igual trimestre de 2019, mientras que la producción de alimentos y bebidas tuvo una mejora de 3,2%, seguida de la refinación de petróleo con un aumento de 2,5% y la producción de insumos textiles (1,5%). En cambio la producciónde papel y celulosa cayó 0,1%, pero se mantuvo por encima del promedio, Los restantes sectores de actividad muestran un retroceso de la producción más marcado que el promedio comenzando la producción metalmecánica (-2.,%), la siderurgia (-8,7%), los despachos de cigarrillos (-11,3%), la fabricación de automotores (-14,7%) y finalizando con la producción de
minerales no metálicos (-21,5%).
"Siguiendo la clasificación de las ramas industriales según el tipo de bienes y en línea con el desempeño sectorial, la producción de bienes de capital y durables comienzan a acumular en el primer trimestre una caída que se profundizará en los próximos meses. En efecto, mientras que los bienes de consumo no durable acumulan una recuperación de 1,1%, seguidos de la producción de bienes de uso intermedio que avanzan 0,8%, los bienes de consumo durable muestran un retroceso de 5,2% y los bienes de capital se contraen 9% en el periodo enero-marzo y en la comparación con el mismo periodo del año anterior".
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