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El Presidente inició una serie de reuniones para intentar encauzar las paritarias. Con el líder camionero buscó apagar otro foco de conflicto interno tras el paro del transporte que realizó la facción disidente a Roberto Fernández, a la que apoyó el moyanismo.
Tras desactivar los cruces por la inseguridad con la Provincia, Alberto Fernández buscó apagar otro foco de conflicto interno que complica los planes de su Gobierno: en medio de la puja en la Unión Tranviarios Automotor, el jefe de Estado recibió en su despacho al líder camionero Hugo Moyano, quien en las elecciones en el gremio apoyó a la facción disidente que desafía a su titular Roberto Fernández y este martes generó un paro que incomodó a la Casa Rosada.
Pasadas las 11.30, Moyano ingresó por el Salón de los Bustos. Primero pasó por el Ministerio del Interior, para reunirse con Eduardo "Wado" de Pedro. Y luego juntos subieron al primer piso de la Casa Rosada, al despacho del Presidente, donde estuvieron poco más de una hora y media.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, pasó a saludar y volvió a la reunión que mantuvo con la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta; para que los funcionarios de su área se capaciten por la "Ley Micaela".
El encuentro entre Alberto F. y Moyano, confían en el Gobierno, sirvió para descomprimir la tensión que quedó expuesta desde el inicio de la gestión. Sucede que el camionero quería imponer a Guillermo López del Punta como secretario de Transporte, pero el massista Mario Meoni finalmente se inclinó por el ex intendente de Alta Gracia Walter Saieg.
Esto desató duras críticas de Moyano hacia el propio ministro y también cierta tensión con la Casa Rosada.
La novela continuó la semana pasada, cuando Moyano se desmarcó del objetivo del Gobierno de que los gremios pacten aumentos de sumas fijas como anticipo de las paritarias hasta mediados de año: acordó una suba del 26,5% para los Camioneros hasta junio.
La discusión paritaria ocupa especialmente al Presidente. De hecho, este lunes había adelantado que en estos días comenzaría "una serie de reuniones con sindicalistas para organizar las cosas". "(Los gremios) son muy importantes, quiero que sean parte de este tiempo, no sólo que se sienten a las mesas paritarias. Antes de que empiece me he ordenado la agenda para hablar con todos ellos", indicó, en diálogo con radio Continental. Y expuso su postura: "Lo que sí busco es evitar todo mecanismo de indexación de la economía. Y la cláusula gatillo es un método de indexación".
clarin
