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El coronavirus podría estar mermando el consumo de petróleo y gas natural de China, pero es posible que las emisiones de carbono del país en realidad aumenten este año.
Un paquete de estímulo del gobierno que se está planificando para combatir el impacto económico del brote viral probablemente se enfocará en aumentar la inversión en infraestructura, lo que probablemente aumentará el uso de carbón, indicó el martes BloombergNEF en un informe. El combustible fósil, que es más sucio, sigue siendo la principal fuente de energía en China pese a los esfuerzos realizados en la última década para limpiar el sector favoreciendo la nueva generación renovable.
“Para respaldar el proceso de recuperación, es muy probable que el gobierno adopte medidas para dar soporte a nuevas caídas de los precios de la energía”, señaló BNEF. “Es posible que, a pesar de la menor demanda de gas y petróleo, las emisiones de carbono aumenten”.
La demanda de petróleo se ha visto particularmente afectada debido a que el número de pasajeros del transporte vial, ferroviario, aéreo y marítimo ha descendido en 83% respecto del año anterior debido a las restricciones de viaje, según BNEF. Mientras tanto, los analistas redujeron su pronóstico de crecimiento de la demanda de gas natural para todo el año debido al menor consumo en centros comerciales y restaurantes, junto con una gran caída en el uso del transporte.
Es posible que el impacto en la fabricación china de baterías sea limitado, debido a que la provincia de Hubei, epicentro del brote, representa solo 4% de la capacidad. Si bien los retrasos en la reanudación de la producción de automóviles, tras la extensión de los días feriados del Año Nuevo Lunar, afectarán la demanda, el sector igualmente crecerá al menos 6% a pesar de una ligera disminución en las ventas de vehículos eléctricos de pasajeros, sostuvo BNEF.
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